SANA, 22 Mar. (Reuters/EP) -
El presidente yemení, Alí Abdulá Salé, ha advertido a los comandantes del Ejército de que podría haber una guerra civil en el país por los esfuerzos para lo que calificó de "golpe" contra su régimen.
"Aquellos que quieren ascender al poder mediante golpes deberían saber que esto está fuera de toda duda. La patria no será estable, habrá una guerra civil, una sangrienta guerra civil", ha señalado en un discurso, subrayando que "deberían considerar cuidadosamente esto".
El presidente defendió ayer que la "gran mayoría del pueblo" apoya "la seguridad, la estabilidad y la legitimidad constitucional" y aseguró que los "organizadores del caos, la violencia, el odio y el vandalimo" son "unos pocos".
Salé perdió este lunes el apoyo de importantes elementos de su régimen, entre ellos decenas de miembros del Ejército, varios embajadores, el principal dirigente tribal y el gobernador de la segunda provincia más importante del país, Adén (en el sur).
Entre los numerosos militares --se habla de hasta medio centenar-- que se declararon este lunes en rebeldía contra Salé se encuentra el destacado general Alí Mohsen al Ahmar, jefe de la región militar occidental y de la primera división acorazada, un viejo aliado del presidente y veterano de las guerras civiles del país, a quien las organizaciones de Derechos Humanos han acusado en el pasado de perpetrar crímenes de guerra.