BUENOS AIRES, 25 Jun. (EUROPA PRESS) -
Santiago López Menéndez, un ingeniero argentino de 28 años, fue secuestrado el miércoles por la mañana mientras trabajaba en un campo en Kontagora, en el este de Nigeria, y se sospecha que estaría en manos de delincuentes comunes y no del grupo terrorista Boko Haram, especialmente activo en el norte del país, según informa la prensa argentina.
López se encontraba junto a otros empleados de la empresa para la que trabajaba, Flour Mills of Nigeria, en una finca de la misma cuando hombres armados en motos llegaron haciendo disparos al aire y tras gritar "¡no queremos matar a nadie!", se llevaron consigo al argentino, según ha relatado su hermana Manuela al diario 'La Nación'.
"Creemos que se lo llevaron a él porque era el único extranjero en el lugar", ha precisado la hermana al diario 'Clarín', aclarando que por el momento "no nos llamó nadie ni hubo ninguna comunicación". La novia del joven aseguró a la hermana que "nunca les había pasado algo así ni parecido, pero parece que hay bandas nómadas que hacen esto para después pedir plata".
De hecho, fuentes extraoficiales han señalado a 'Clarín' que la empresa para la que trabaja el argentino habría recibido ya una llamada telefónica pidiendo un rescate a cambio de su liberación y va a enviar a un negociador. Las fuerzas de seguridad nigerianas han encontrado abandonada la camioneta en la que se llevaron al ingeniero pero en ella no estaban sus pertenencias.
El embajador argentino en Nigeria, Gustavo Dzugala, y el cónsul, Leandro Ragone, se han trasladado ya a la ciudad donde vivía López y su pareja. "Parece que fue algo local, se trataría más bien de un secuestro extorsivo por dinero. Esta es una zona tranquila, no hay una actividad islamista ni sería el grupo Boko Haram", ha declarado Dzugala a una radio argentina.