WASHINGTON, 14 Dic. (Reuters/EP) -
El Tribunal Supremo de Estados Unidos se ha negado este lunes a retomar una demanda de Derechos Humanos contra la empresa Occidental Petroleum y un contratista de seguridad, acusados de complicidad en un ataque mortal cometido en 1998 por militares en un pueblo del noreste de Colombia.
El Supremo ha dejado intacto un fallo de 2014 del noveno Tribunal de Circuito de Apelaciones que indica que las familias de las víctimas no pueden presentar demandas contra Occidental ni contra AirScan, con sede en Houston (Texas) y en Florida, respectivamente.
La demanda fue presentada tras un ataque con una bomba de racimo en diciembre de 1998 de la Fuerza Aérea Colombiana en el que murieron 17 personas, incluidos seis niños. El incidente tuvo lugar cerca del pueblo de Santo Domingo, en la provincia de Arauca, durante una operación contra guerrilleros izquierdistas que habían destruido con explosivos un tramo del oleoducto Caño Limón-Coveñas.
Occidental y AirScan fueron acusadas de proporcionar a los militares colombianos el apoyo financiero y logístico para el bombardeo. Sin embargo, las dos empresas han negado las acusaciones, y Occidental ha asegurado que no proporcionó ninguna ayuda letal.
La sentencia de primera instancia se basa en parte en una decisión de 2013 del Supremo en la que los magistrados determinaron por unanimidad hacer más difícil las demandas contra corporaciones en los tribunales estadounidenses por presuntos abusos ocurridos en el extranjero. Algunas empresas de Estados Unidos que han enfrentado demandas similares han tenido un éxito considerable de acuerdo a esa sentencia.