MADRID 21 Ene. (EUROPA PRESS) -
Una serie de documentos obtenidos por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) ha puesto de manifiesto que al menos trece familiares de antiguos y actuales dirigentes del régimen chino, entre ellos un cuñado del actual presidente, Xi Jinping, disponen de compañías en paraísos fiscales como las Islas Vírgenes.
La información, publicada por varios medios internacionales, entre ellos el periódico español 'El País', se basa en más de 200 gigas de datos obtenidos de dos compañías de las Islas Vírgenes y sale a la luz tras dos años de investigaciones.
Los datos del ICIJ revelan que más de 21.000 clientes de la China continental y de Hong Kong han recurrido a paraísos fiscales, incluidas personalidades de la denominada' nobleza roja', como se conoce a los parientes de las cúpulas comunistas.
Así, entre los clientes sobresalen los nombres de 13 'príncipes rojos', incluido el de Deng Jiagui, cuñado del actual jefe de Estado y propietario junto a su mujer de un imperio inmobiliario, así como el de Wen Yunsong, hijo del ex primer ministro Wen Jiabao, y el de Liu Chunhang, yerno del antiguo jefe de Gobierno.
En la lista también figuran Hu Yishi, hijo de un primo del expresidente Wen Jiabao; Li Xiaolin, hija del ex primer ministro Li Peng; Wu Jianchang, yerno del líder supremo Deng Xiaoping; Che Feng, yerno de un exgobernador del banco central; Wang Xhi, hijo del exvicepresidente Wang Zhen; Wang Jun, hijo del exvicepresidente Wang Zhen; Fu Liang, hijo de uno de los 'ocho inmortales' del Partido Comunista; Yeh Shuen Ji, sobrino del fundador de la República; Wang Jingjing, nieta de uno de los 'ocho inmortales'; y Su Zhijun, nieto del militar comunista Su Yu.
La élite empresarial china también se ve salpicada por unos documentos que incluyen entre los presuntos defraudadores a Ma Huateng, confundador del gigante de Internet Tencent Inc y responsable de programas como Weibo --considerado el Twitter chino-- y Yang Huiyan, la mujer más rica de su país.
DESIGUALDAD
El rápido crecimiento experimentado por China en los últimos años se ha traducido en una desigualdad cada vez mayor. Los cien hombres más ricos del país acumulan 300.000 millones de dólares, mientras que unos 300 millones de personas viven con menos de dos dólares al día.
El Gobierno ha hecho esfuerzos en aras de la transparencia y la rendición de cuentas por parte de la cúpula gobernante, pero ni los dirigentes ni sus familias están obligados a hacer pública su fortuna, informa el periódico 'The Guardian', que también ha tenido acceso a la investigación de la ICIJ.
La existencia de más de 21.00 clientes del gigante asiático con cuentas en paraísos fiscales sitúa a China por delante de países como Taiwán, que tiene 15.000, y muy por delante de países como Estados Unidos (3.700), Rusia (2.200) o Reino Unido (762), entre otros.