WASHINGTON 16 Abr. (Reuters/EP) -
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha vuelto a arremeter este domingo contra el exdirector de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) James Comey de cara a la publicación de un libro en el que éste lo compara con un mafioso y lo acusa de haberle presionado en el marco de la investigación sobre su complicidad con el Kremlin para llegar a la Casa Blanca.
"James Comey, un hombre que acaba siempre mal y fuera de control (no es inteligente). ¡Caerá como el peor director del FBI de la historia como mínimo!", ha aseverado el magnate neoyorquino este domingo a primera hora a través de su cuenta de Twitter, donde ha aludido directamente a Comey.
Posteriormente, Comey ha respondido al comentario de Trump y ha asegurado que su libro, 'A Higher Loyalty' (Una lealtad mayor), trata del "liderazgo ético". "Hay tres presidentes en mi libro: dos sirven para ilustrar los valores de un liderazgo ético y otro funciona como contrapartida. Espero que la gente lo lea y lo encuentre útil", ha explicado.
El pasado 13 de abril, el presidente estadounidense tildó a Comey de "mentiroso demostrado", "topo" y "caradura" después de que su antiguo subordinado, a quien despidió el pasado mes de mayo, le describiera en su nuevo libro como un "mafioso".
"James Comey es un TOPO Y MENTIROSO demostrado. Prácticamente todos en Washington pensaban que tenía que despedirlo por el terrible trabajo que hacía hasta que, de hecho, fue despedido", escribió Trump en su cuenta de Twitter tras conocer el contenido del libro, que será publicado el próximo este martes, 17 de abril.
El libro señala que Trump, durante un encuentro privado, presionó al entonces director de la agencia para que no vulnerara la lealtad hacia el dirigente en el marco de la pesquisa sobre la presunta injerencia rusa en la campaña electoral de 2016.
Sin embargo, el magnate ha insistido en rechazar tales acusaciones. "Nunca le he pedido lealtad a Comey. Ni siquiera le conocía bien. Se trata de otra de sus muchas mentiras", ha añadido Trump.
Como publicó el 'New York Times' al día siguiente del despido de Comey, el todavía director del FBI se reunió la semana anterior con el vicefiscal general, Rod J. Rosenstein, para ahondar en estas investigaciones, de acuerdo con tres fuentes.
Comey explicó la semana pasada en una entrevista a la ABC que Trump intentó ordenarle que desmintiera cualquier tipo de acusación que pudiera emerger de un viaje realizado por el magnate a Rusia en 2013. "Le dije: 'Señor, eso depende de usted, pero debe tener cuidado con eso, porque podría crear la narrativa de que le estamos investigando personalmente y, en segundo lugar, es muy difícil probar que algo no sucedió", ha indicado.
El exdirector del FBI ha recibido las críticas de republicanos y demócratas, no solo por el caso ruso, sino también por la gestión que el FBI hizo de las indagaciones sobre los correos electrónicos de la ex candidata presidencial Hilary Clinton, cuya reapertura días antes de las elecciones dinamitó el proceso, según ha denunciado ella.