TÚNEZ 21 Feb. (Reuters/EP) -
La ministra de Turismo de Túnez, Selma Elloumi, ha dicho que el país espera un número récord de turistas para 2018, lo que revertirá el daño infligido en el sector por los ataques terroristas registrados en varis puntos turísticos en 2015.
Varias grandes empresas de turismo europeas han comenzado a volver a ofertar sus servicios en el país, después de dejarlo de lado durante tres años tras el atentado en la playa de Susa, en el que murieron 39 personas, y el Museo Nacional Bardo, en el que murieron otras 21.
"Queremos recibir a 8 millones de turistas este año y tenemos un porcentaje alto de reservas por parte de clientes europeos y de otros colectivos nuevos", ha declarado Elloumi. "El retorno de los turistas británicos es una señal muy buena para nosotros", ha añadido la ministra.
El pronóstico de 8 millones supera el número de turistas que llegaron a Túnez en 2014, el año anterior a los ataques: 7,1 millones. En 2015, las visitas bajaron a causa de los atentados a 5,3 millones de personas.
En 2017, el número volvió a alcanzar los 7 millones gracias a los visitantes provenientes de Rusia y de Argelia, pero las empresas especializadas afirmaron que estos colectivos se gastan menos durante sus viajes que los europeos.
Elloumi ha dicho que Túnez espera que el sector turístico obtenga un 25 por ciento más de ganancias que en 2017, cuando fueron de casi un millón de euros.
Esta industria supone el 8 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) de Túnez. El retorno de los visitantes europeos supondría un gran impulso a la economía del país y aumentaría las reservas tunecinas de monedas extranjeras.