La UMP propone suprimir la concesión automática de la nacionalidad a los nacidos en Francia

Actualizado: martes, 17 diciembre 2013 21:49

El ministro del Interior anuncia que el Gobierno revisará antes de fin de año la política de asilo

PARIS, 23 Oct. (Reuters/EP) -

El presidente de la Unión por un Movimiento Popular (UMP), Jean François Copé, ha propuesto que se ponga fin a la concesión automática de la nacionalidad a cualquiera que nazca en Francia, mientras que el ministro del Interior francés, Manuel Valls, ha anunciado que presentará antes de fin de año una propuesta para reformar la política de asilo.

La inmigración está dominando el debate político en Francia en los últimos días a raíz de la polémica expulsión de una adolescente gitana y su familia a Kosovo. Al contrario que Alemania y otros países europeos, donde los lazos sanguíneos son los que determinan la nacionalidad, Francia mantiene el concepto de nacionalidad basada en el 'ius soli' (derecho del suelo).

Copé, delfín del expresidente Nicolás Sarkozy y que podría presentarse a las presidenciales de 2017, anunció este martes que presentará un proyecto de ley antes de final de año para cancelar la concesión automática de la nacionalidad para los hijos de inmigrantes ilegales.

"Los hijos nacidos en Francia de padres que se encuentran ilegalmente en suelo francés no pueden convertirse automáticamente en franceses", defendió Copé. "Es incomprensible y apenas se ve en otros sitios en Europa", añadió.

Actualmente, un niño nacido en Francia de padres no franceses puede adquirir la nacionalidad al nacer si al menos uno de los progenitores nació en Francia. Además, los padres, ya estén o no legalmente en el país, pueden solicitar la nacionalidad para sus hijos de más de 13 años si estos han vivido al menos cinco años en Francia.

PROXIMIDAD AL FN

La propuesta de Copé recuerda a las formuladas por el ultraderechista Frente Nacional (FN), que lleva tiempo reclamando una reforma migratoria en la que se endurezca el proceso de naturalización, se contemple la deportación sistemática de inmigrantes ilegales y una reducción drástica del número de inmigrantes legales que se autoriza en Francia.

El FN está aprovechando la baja popularidad del presidente, el socialista Francois Hollande, y el descontento con la UMP, el principal partido opositor, de cara a las elecciones municipales y europeas del próximo año.

La reciente victoria de un candidato del FN sobre su rival de la UMP en unas elecciones locales en el sureste del país ha puesto de manifiesto el creciente atractivo entre los votantes del Partido Socialista y la UMP desencantados.

CRÍTICAS A COPÉ

"La UMP en el país del FN", titula en portada este miércoles en diario 'Liberation', de tendencia de izquierdas. También en las filas de la UMP han sido varias las voces que han expresado su desacuerdo con Copé.

"Yo rechazo que se ponga en duda el derecho del suelo", ha declaradoa BFMTV-RMC el diputado Henri Guaino, antiguo consejero de Nicolas Sarkozy, que ha defendido que esta cuestión forma parte de la cultura francesa. Por su parte, el vicepresidente de la UMP, Luc Chatel, ha rechazado en France Info las comparaciones con el FN y ha defendido que este debate es importante.

"Sobre inmigración, escucho desde ayer que la UMP va por detrás del Frente Nacional; la UMP hace como todas las grandes formaciones en los países desarrollados, reflexiona sobre lo que es un gran tema del siglo XXI", ha subrayado.

Por su parte, el líder parlamentario de la UMP, Christian Jacob, ha incidido en que la propuesta de ley no abordará únicamente la cuestión del derecho de suelo, sino que será uno de los tres ejes de la reforma migratoria que proponen junto con Schengen y el atractivo social.

Ante la subida del FN en las encuestas, Valls ha endurecido su retórica contra la inmigración ilegal y los campamentos de gitanos, generando malestar entre sus aliados de extrema-izquierda.

REFORMA DEL SISTEMA DE ASILO

Este miércoles, Valls ha anunciado que el Gobierno presentará propuestas para reformar el sistema de asilo en profundidad para mediados de noviembre, tras varios meses de consultas.

Según ha explicado al término del Consejo de Ministros, el objetivo es "acelerar los plazos de gestión del derecho de asilo, un derecho constitucional, un derecho fundamental, que no puede confundirse con las políticas de inmigración". En su opinión, los plazos actuales "son demasiado largos".

Según los medios franceses, la idea del Ministerio del Interior es reducir a la mitad del plazo para la tramitación de los casos, pasando de los 16 meses actuales a seis o nueve meses.

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