TRÍPOLI, 10 Oct. (Reuters/EP) -
El primer ministro libio, Alí Zeidan, ha llegado este jueves a su oficina, poco después de ser liberado por un antiguo grupo rebelde que le había secuestrado esta mañana, según ha comprobado Reuters desde el lugar. Asimismo, la televisión libia ha mostrado imágenes de la llegada de Zeidan, quien tiene previsto celebrar una rueda de prensa.
El primer ministro fue liberado este jueves después de permanecer varias horas secuestrado por un antiguo grupo armado rebelde próximo al Ministerio del Interior, según ha anunciado el Gobierno provisional.
En un mensaje de Twitter publicado inmediatamente después de su liberación, Alí Zeidan ha asegurado que se encuentra "bien" y ha precisado que el objetivo de los secuestradoras era conseguir su dimisión y que él no tiene intención de hacerlo.
El Gobierno provisional había informado a primeras horas del jueves en un comunicado de que Zeidan había sido detenido y trasladado a "un lugar desconocido" por la Sala de los Revolucionarios Libios, un antiguo grupo rebelde que colabora con el Ministerio del Interior en labores de la seguridad en la capital, Trípoli.
La Sala de los Revolucionarios Libios reivindicó posteriormente la captura y aseguró que había actuado "por orden de la Fiscalía". No obstante, el fiscal general de Libia, Abdelqader Radwan, negó inmediatamente que el Ministerio Público hubiera emitido una orden de arresto contra Zeidan y advirtió de que la detención del primer ministro constituía "un crimen" y que sus autores deberían ser "castigados".
Poco después, el portavoz del departamento contra el crimen del Ministerio del Interior aseguró a la agencia estatal de noticias que Zeidan se encontraba detenido en las instalaciones del departamento, donde estaba "bien de salud" y sería tratado "como cualquier otro ciudadano".
En medio de estas informaciones, el Gobierno, reunido de emergencia para evaluar la situación, condenó "el secuestro" de Zeidan y aseguró que no cedería a ningún "chantaje" que pusiera en peligro la estabilidad institucional del país.
La Sala de los Revolucionarios Libios también aseguró, poco después del secuestro, que la detención de Zeidan había sido una respuesta a la operación llevada a cabo por las fuerzas especiales de Estados Unidos en Trípoli para detener al supuesto líder de Al Qaeda Nazih al Raqi, alias Abu Anas al Libi, y anunció que seguiría persiguiendo a "todos" los que ayudaron en la captura de Al Libi.