TEGUCIGALPA, 3 Nov. (EUROPA PRESS) -
El presidente derrocado de Honduras Manuel Zelaya aclaró este martes, a través de un comunicado, que su restitución en la Presidencia es un tema que "no está en discusión" por ser la única solución para "revertir" el golpe de Estado, al tiempo que ha hecho un llamamiento a la comunidad internacional a mantenerse "vigilante" para que el Gobierno 'de facto' cumpla con el acuerdo firmado la semana pasada.
"El cargo del presidente de la República que constitucionalmente eligió el pueblo hondureño para un mandato de cuatro años no está en discusión, por lo que el Congreso Nacional debe actuar con responsabilidad y derogar los decretos con los que ilegalmente pretendieron destituir" a Zelaya, señala el texto.
El mandatario depuesto, que se encuentra desde hace un mes refugiado en la Embajada de Brasil, ha respondido a las "distorsiones públicas realizadas por los miembros de la comisión negociadora que representaba" al presidente interino, Roberto Micheletti, en los diálogos que tuvieron como resultado un acuerdo que contempla su restitución en el cargo, con previa aprobación del Congreso.
Para poder "revertir el golpe de Estado militar y restaurar el orden constitucional" la solución "irrevocablemente pasa por la restitución sin demora" de Zelaya, tal y como lo establece el acuerdo que los 'zelayistas' han puesto por nombre "Tegucigalpa/San José", por incluir propuestas del plan que promovió hace dos meses el presidentes de Costa Rica, Óscar Arias.
El mandatario depuesto considera que "cualquier interpretación fuera de este contexto seria inaceptable y constituiría una nueva afrenta al pueblo hondureño y a la comunidad internacional", por tanto, ha rechazado "la utilización de estrategias dilatorias" por parte de Micheletti.
Finalmente, Zelaya ha hecho un llamamiento a la comunidad internacional a que "se mantenga vigilante para que en cumplimiento del Acuerdo Tegucigalpa/San Jose, el Congreso Nacional proceda" a su "inmediata restitución".
"Solo entonces podremos alcanzar la reincorporación de Honduras en el concierto de las naciones, el levantamiento de las sanciones impuestas al régimen 'de facto' y el reconocimiento al próximo proceso electoral, el que deberá desarrollarse en un entorno de legalidad, legitimidad e igualdad de oportunidades", finaliza el texto.