El presidente de Puertos de Tenerife admite que "no se puede hacer una tortilla sin romper huevos, pero que el impacto en la costa será el menor"
SANTA CRUZ DE TENERIFE, 10 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Autoridad Portuaria de Tenerife, Pedro Rodríguez Zaragoza, reunió hoy a todos los medios en la capital tinerfeña para anunciar que las obras del puerto de Granadilla "comenzarán este viernes" tras haber "cumplido con todas las demandas y exigencias de las administraciones".
Rodríguez Zaragoza --que estuvo acompañado en todo momento por representantes de colectivos contrarios a la obra del puerto industrial que desplegaron una pancarta a su lado manifestando su desacuerdo-- aseguró que no le consta la existencia de ningún tipo de denuncia o queja que pueda retrasar aún más el proyecto que fue adjudicado "en julio de 2007 el dique exterior y en noviembre del pasado año el contradique".
El presidente de Puertos defendió, una vez más, que esta obra "es necesaria", que en "1992 fue declarada de interés general" y recordó que la isla necesita un puerto "hub" para poder importar directamente y no 'conformarse' con un muelle "fyde" para tráficos que unen una isla con otra.
Reconoció que no había podido 'convencer' a toda la población de la importancia de esta instalación, no obstante aseguró que "aunque no se lleguen a acuerdos, en esto cada uno cumple su papel y el mío es el de sacar adelante un proyecto declarado de interés general". Los primeros pasos que se darán antes, incluso, de la construcción es la de "arrancar plantas de interés" de la zona, para trasladarlas a las instalaciones del Cabildo de Tenerife.
Otro de los temas que pretende resolver "de forma voluntaria" es la de traslocar sebadales, así como recuperar en mayo las semillas de las sebas para cultivarlas en otros puntos de la costa. Aseguró que ya se han comenzado a hacer cultivos tanto en la costa de Arico como en el Lugar de Interés Comunitario de San Andrés.
"Nosotros no queremos que se rebaje la categoría de los sebadales, sino en la zona de puertos", dijo Rodríguez Zaragoza que aseguró que desde que comenzaron los estudios para la puesta en marcha del proyecto además de declararse dos nuevos Lugares de Interés Comunitario --Antequera (en Tenerife) y costa de Güí-Güí (en Gran Canaria)-- se han hecho estudios sobre la presencia de la conocida como tortuga boba, encontrándose tan sólo y en este tiempo "cinco ejemplares que han sido reconocidos y catalogados".
El presidente de la Autoridad Portuaria defendió que no temía recibir "quejas comunitarias" pues, según argumentó, "hemos hecho todo lo que nos han pedido en todo momento". Sin embargo, afirmó que "es evidente que una tortilla no se puede hacer sin romper los huevos". "Se han cumplido las condiciones y se trabaja para reducir el impacto para hacer un puerto, no para hacer un desastre. En el peor de los casos afectaría sólo a un 1,3 por ciento del total de los sebadales" abanderó el presidente.
Rodríguez Zaragoza recordó que la obra del Puerto Industrial de Granadilla nació con la ley de 27/1992 como obra de interés general y " a menos que un juez declare ilegal la ley, el proyecto se ejecutará". Para reconocer también que "puede ser que pasado mañana cambie la ley y se declare ilegal, pero no es el caso".
Ante la ausencia de representantes de organizaciones ecologistas en la Fundación Observatorio Puerto de Granadilla, Rodríguez Zaragoza se mostró rotundo. "¿Quién dice que quienes están son los malos y los otros son los buenos? Hubo un periodo abierto para que se presentaran todos los que quisieran y sólo se presentó una que cumple las condiciones y, por tanto, vale", aseveró ante la presencia de Antonio Machado, presidente de la Fundación y profesor de Ecología de la Universidad de La Laguna.
UNA OBRA MILLONARIA
El proyecto que se ejecutará en unos tres años, según Rodríguez Zaragoza, contempla la construcción de un dique y un contradique. El primero dispone de un presupuesto de 114 millones y el segundo de 19 de los que "40 millones serán para manos de obra para un tota de 600 empleados de forma directa e indirectas", explicó.
Asimismo las obras generarán una superficie de 260.000 metros cuadrados; la planta regasificadora dispondrá, a su vez de 150.000 metros cuadros --y una inversión de 260 millones de euros-- y habrá 195.000 para graneles. La obra principal durará 73 meses y está adjudicada a la Unión Temporal de Empresas de FCC con, Sato y PPL, mientras que el dique exterior fue adjudicado a la de Dragados con SPS y Traysesa.
El puerto "estará junto al polígono industrial de Granadilla que contempla 6 millones de metros cuadrados lo que es ventajoso", aclaró el presidente de la Autoridad Portuaria que reconoció, a su vez, que se ha llegado a "un acuerdo con el Cabildo de Tenerife y el Gobierno de Canarias" --propietarios del polígono-- para rebajar en cuatro metros "la altura" de estos terreno para hacer los rellenos del dique.
El nacionalista reiteró, una vez más, que la Unión Europea ha destinado 68 millones de euros de los Fondos de Cohesión para la obra y se negó a comparar el futuro puerto tinerfeño con el de Arinaga en Gran Canaria, construido también con fondos europeos y con el objetivo de instalar la regasificadora, pero que tras su puesta en funcionamiento apenas ha contado con tráfico, según se ha señalado en los medios de comunicación esta semana. "No tengo conocimiento de lo que ha pasado en Arinaga", justificó Rodríguez Zaragoza.
Este también defendió que la obra no iba en contra del puerto de Santa Cruz de Tenerife, señalando que Granadilla dispondrá "26 hectáreas frente a las 30" del capitalino. Insistió en que en Los Llanos no hay calado sino hasta 8 metros y los barcos precisan de más. "¿Qué llegó la hora? Sí", concluyó el presidente de puertos de la provincia.