El Gobierno riojano pide la regulación de siete ríos en cabecera para garantizar el abastecimiento de agua

LOGROÑO 19 Nov. (EUROPA PRESS) -

Los consejeros de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, Íñigo Nagore, y Obras Públicas, Política Local y Territorial, Antonino Burgos, han detallado esta mañana las 44 alegaciones presentadas por el Ejecutivo riojano a la propuesta del Plan Hidrológico de la Cuenca del Ebro, que inciden en la necesidad de regular en cabecera siete ríos de la comunidad autónoma con el fin de "garantizar el abastecimiento de agua a los municipios y el desarrollo de la agricultura".

Los consejeros han resaltado que las alegaciones al proyecto en el que trabaja Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) es un "documento de planificación, con todas las necesidades actuales y futuras de La Rioja, dentro del principio de solidaridad, sin perder de vista el principio de unidad de cuenca, pero sin renunciar a lo que es necesario para La Rioja".

Se trata, ha indicado Nagore, de realizar las "actuaciones necesarias para satisfacer todas las demandas" de La Rioja y "lograr el adecuado equilibrio territorial, armonizado de la cuenca del Ebro".

En este sentido, han considerado esencial "el impulso definitivo" de las obras de la presa de Enciso, una actuación fundamental para la puesta en marcha del sistema de abastecimiento del Cidacos, que afecta a 15 municipios de La Rioja Baja con una población de 71.000 habitantes. Asimismo, han solicitado agilizar las obras de las presas de Soto Terroba y Regajo, bastante avanzadas, para que puedan entrar en funcionamiento lo antes posible.

La construcción de un embalse en la cabecera del Oja es otra obra muy necesaria" para garantizar el suministro a los 46 municipios riojanos incluidos dentro del sistema de abastecimiento del Oja-Tirón. Este proyecto se completa con la ejecución de las balsas laterales de Manzanares y Corporales para nuevos regadíos.

"CON RETRASO"

Nagore, no obstante, ha afirmado que el Plan "llega con retraso, ya que se inició en 2005, y se paralizó sin explicación, en los últimos años de Gobierno socialista, y ha tenido que ser con urgencia un Gobierno popular el que lo haya reactivado". El retraso, que conlleva poder incumplir la Directiva Marco del Agua, y por ello existe "riesgo grave de tener sanciones importantes, y también pone en riesgo percibir fondos"

Las alegaciones, ha señalado, que parten de un hecho de que "existe una falta de regulación en la margen derecha del Ebro, en general, y en La Rioja en particular, derivada de que no se han ejecutado muchas de las obras previstas en el Plan Hidrológico anterior, de 1998".

El Plan contempla "todas las necesidades que quiere La Rioja y la consolidación, y se preve una reserva para atender necesidades de regadío, de 128,75 hectómetros cúbicos y año", si bien "hemos reclamado una reserva adicional de 20 hectómetros cúbicos pero no de los afluentes, sino del tramo riojano del Ebro, para a partir de ahí desarrollar actividades de regadío".

Ha señalado que "tenemos problemas" en los desembalses del Iregua, por lo que "creemos necesario que se incorporen en el plan dos nuevas estaciones de aforo, y se planteen unos caudales mínimos: uno que ya existe en Islallana, y que se construya otro en Varea, por ello los desembalses se harían de forma razonable"

MODERNIZACIÓN DE REGADÍOS

Las demandas del Ejecutivo riojano también hacen referencia a la construcción de las infraestructuras de regadío y a garantizar las reservas de aguas suficientes para el desarrollo de la agricultura. En este sentido, se considera prioritaria la modernización de los canales de riego del Najerilla, en especial, la construcción de la balsa de almacenamiento en el sector 3º, tramo III, de la margen izquierda, con el fin de garantizar el riego, además de la finalización de los sectores pendientes.

El Gobierno de La Rioja también ha solicitado que se contemple el Plan Director de Saneamiento y Depuración de La Rioja; la participación de las comunidades autónomas en la fijación de los caudales ambientales de los ríos o el establecimiento de criterios claros y precisos sobre los desembalses.

POR CUENCAS

A continuación, Burgos ha desgranado las actuaciones por cuencas. En el caso de la del Oja, ha dicho que es necesario un embalse en cabecera con una reserva de 4,5 hectómetros cúbicos al año que garantice el abastecimiento a los municipios en época estival completando la explotación del acuífero Pradoluengo-Anguiano. Y también la ejecución de las balsas laterales de Manzanares y Corporales para nuevos regadíos.

En el Tirón, se contemplar un embalse aguas arriba de Belorado que sustituya al de Villagalijo, con una reserva de 18,75 hectómetros cúbicos al año para satisfacer las necesidades de riego y abastecimiento.

En el Cidacos, hay que impulsar las obras de la presa de Enciso, mientras en el Iregua, contempla la ampliación de regadíos en la intercuenca Iregua y Leza, con los recursos procedentes de los embalses de Pajares y González Lacasa, y no de los procedentes del plan de aguas depuradas de la EDAR de Logroño como plantea el documento de propuesta.

En la cuenca Alhama, impulsar la presa de Cigudosa-Valdeprado para garantizar las necesidades de abastecimiento, regadío y laminación de avenidas, mientras que en Linares: Contemplar la ejecución de un embalse aguas arriba de Cornago en sustitución de la presa de Villarijo con una reserva de 4 hectómetros cúbicos/año para abastecimiento, regadíos y laminación de avenidas.

Jubera: Contemplar la ejecución de la presa de Robres del Castillo para garantizar las necesidades de agua no solo en esta cuenca sino también en los municipios de Galilea y Ocón y para la laminación de avenidas con una reserva de 8 hectómetros cúbicos al año, en el Cárdenas, mantener el embalse de San Lorenzo para abastecimiento y regadíos con una reserva de 7 hectómetros cúbicos al año.