Las instalaciones municipales realizan actividades y programas de educación vial dirigidos a escolares de 3 a 12 años

LOGROÑO 9 Mar. (EUROPA PRESS) -

La concejal de Familia y Política Social, Paloma Corres, acompañada del edil de Interior, Miguel Sáinz, han visitado esta mañana el Parque Infantil de Tráfico, unas instalaciones municipales ubicadas en la zona de Siete Infantes de Lara por la que pasarán a lo largo de este curso 5.500 alumnos.

El Ayuntamiento de Logroño, a través del Parque Infantil de Tráfico, realiza actividades y programas de educación vial dirigidos a escolares de 3 a 12 años, incluidos los Centros de Educación Especial, de manera ininterrumpida desde 1986. Hasta el año 2005 la actividad se desarrolló en el antiguo Parque Infantil de Tráfico de 'Chiribitas' inaugurado en mayo de 1973.

Durante el año que duraron las obras de construcción del nuevo Parque Infantil de Tráfico la actividad se desarrolló en los propios colegios con una actividad destinada a los alumnos de 3ª de Educación Infantil y 6º de Primaria basada en la potenciación del uso del cinturón de seguridad. El nuevo Parque Infantil de Tráfico, ubicado en la Calle Rodejón, fue inaugurado oficialmente en 2006 y su instalación fija está constituida por un circuito de viales, reproducción de situaciones de tráfico, con elementos propios de las vías públicas, con sus correspondientes vías y señalización semafórica, vertical y horizontal.

La Unidad de Educación del Ayuntamiento de Logroño es la responsable de llevar a cabo las actividades del Parque Infantil de Tráfico, en el que trabajan dos personas.

Las actividades formativas que se desarrollan en este centro se unen al resto de actuaciones de sensibilización en materia de educación vial que está desarrollando el Consistorio logroñés. Se ha llevado a cabo la campaña 'Cruza Seguro' en la que participaron 300 personas mayores de 65 años y se está desarrollando la campaña de educación vial en los centros educativos.

MÁS CURSOS

En primavera policías locales impartirán junto con otros técnicos municipales y colectivos unas jornadas formativas dirigidas a los ciclistas que se desarrollarán por los distintos distritos de la ciudad. "El objetivo es mejorar la seguridad vial en nuestra ciudad y disminuir el número de accidentes", ha señalado el concejal de Interior. Tras la visita al parque se ha celebrado una reunión de trabajo de los técnicos para diseñar el programa de estas jornadas formativas que constarán de dos partes, la primera de carácter teórico y práctico en los barrios de la ciudad y una segunda sólo práctica en el centro de Logroño. Además, el Consistorio trabaja en la concienciación de conductores para garantizar la perfecta convivencia entre automóviles y bicicletas en las vías de la ciudad.

A lo largo de este curso 2011/2012, se estima que unos 5.500 alumnos pasen por el Parque Infantil de Tráfico. De esos 5.500, son casi 2800 alumnos los que participarán este año en el Programa de Educación Vial destinado a los alumnos 5º y 6º de Educación Primaria. El Programa fue iniciado por el Colegio Rey Pastor el 30 de septiembre de 2011 y finalizará con el Colegio Inmaculado Corazón de María el 11 de mayo de 2012.

Este Programa culmina con la celebración del Concurso de Educación Vial Ciudad de Logroño que se celebrará el 26 de mayo en las instalaciones del Parque Infantil de Trafico y que cuenta con la participación de un representante de cada aula de 6º de Educación Primaria (alrededor de 60 participantes). Los 2.700 alumnos restantes pertenecen a todos los niveles educativos existentes: Educación Infantil, Educación Especial y resto de cursos de Educación Primaria.

PROGRAMA DESTINADO A ALUMNOS DE 5º Y 6º DE PRIMARIA

Conscientes de la importancia de la educación vial, como formación del comportamiento ciudadano, el Ayuntamiento de Logroño desarrolla un Programa de Educación Vial, destinado a todos los alumnos de Educación Primaria de Tercer Ciclo de todos los centros públicos y concertados de la capital. Este año se trabaja en la misma línea de actuación que en los cursos anteriores, no sólo por una mayor seguridad de los escolares, como personas inmersas en los problemas de tráfico, sino además, considerándolo como inversión de futuro.

Así, entre los objetivos fijados por el Ayuntamiento de Logroño para esta actividad destaca, tal y como ha explicado Corres, "conocer y respetar las principales normas de circulación aplicables a la bicicleta, la importancia que para la seguridad vial tienen las distintas señales de tráfico y adquirir las conductas necesarias para circular como ciclistas, ya sea en ciudad o en carretera, de forma correcta, bien de día o bien de noche".

En ese sentido, el programa de educación vial consta de dos partes: una parte teórica y otra práctica (en la que los niños se convierten en policías, infractores o buenos conductores para conocer los diferentes comportamientos y aprender a respetarse y respetar a los demás). Con estas dos actividades, los pequeños conocen en profundidad los roles como usuarios de las vías (peatón, viajero y conductor); la señalización; adquieren nociones de normas y conductas de ciclistas y peatones en ciudad y carretera e interiorizan el uso del cinturón de seguridad.

Para Paloma Corres, es necesario que la educación vial se vaya aprendiendo desde pequeños, ya que estos comportamientos, si se profundizan bien, se llevan a cabo en su vida adulta e incluso son transmitidos por los más pequeños de la casa a los mayores. Además, este tipo de educación es la que debe practicarse en la ciudad, cuando se utilice tanto la bicicleta como medio de transporte.

CARACTERÍSTICAS DEL PARQUE

Cabe recordar que Parque Infantil de Tráfico duplica en superficie al anterior, ubicado en Lobete y cuya parcela fue aprovechada para ampliar el Centro Municipal Deportivo. El parque ocupa 3.800 metros cuadrados, con unos 2.500 para el circuito, mil metros de superficie peatonal, 314 zonas verdes y unos 270 metros cuadrados para el edificio, donde se encuentra el aula didáctica y el garaje para bicicletas (114), triciclos (2) y 'karts' (12).

Además, hay dos graderíos con capacidad para 450 personas y el circuito está dotado con 21 semáforos -tres de ellos con pulsador-, 34 señales de tráfico verticales, un puente elevado con tránsito superior e inferior y megafonía. Además, el centro cuenta con personal especializado, aseos, aulas de formación, almacén y despacho con cuatro cámaras de vigilancia de tráfico para controlar a los pequeños conductores.

Semáforos, stops, glorietas, túneles, zonas de habilidad, pasos de peatones y un conjunto de elementos de tráfico en los que se ofrece una educación integral, que combina la diversión con el aprendizaje. En definitiva una forma diferente de aprender educación vial y ocupar el tiempo de ocio.