MADRID 1 Jun. (EUROPA PRESS) -
Alrededor de 5.000 personas acudieron hoy a la manifestación convocada por la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid (FRAVM) por el centro de Madrid en defensa de la "sanidad cien por cien pública y de calidad", informó a Europa Press el responsable de Sanidad de la FRAVM, Pepe Cabanillas.
La FRAVM quiso denunciar "las crecientes listas de espera, que en algunos barrios afectan a los médicos de cabecera, la construcción pendiente de decenas de centros de Atención Primaria y la congelación de la contratación de personal sanitario, en especial de pediatras".
En concreto, el responsable de Sanidad de la FRAVM afirmó a Europa Press que lo que buscan con esta protesta, que terminó con la lectura de un manifiesto en la Puerta del Sol, sede del Gobierno regional, es "parar la locura" que está llevando a cabo la Comunidad de Madrid en la sanidad pública.
Además, piden que se pare "el proceso privatizador" y aumentar la inversión en servicios públicos para así dotar a la sanidad pública de más médicos y pediatras.
Cabanillas, que recorrió el camino a la Puerta del Sol acompañado de miles de personas al ritmo de una batukada, criticó que se "ataquen los programas de salud", así como la implantación del Área única, que en su opinión, va a suponer "cargarse el sistema" en la región y llevar el dinero al "individualismo del médico".
En la misma línea, el portavoz de IU en la Asamblea de Madrid y coordinador de IU-CM, Gregorio Gordo, afirmó a Europa Press que han acudido a respaldar la manifestación de los vecinos para denunciar "el progresivo y manifiesto deterioro de la sanidad pública madrileña en Madrid".
En su opinión, la Comunidad de Madrid está "obsesionada en abrir espacios de negocio a la iniciativa privada en el sector público y en especial, en la sanidad". "Las desgracias que pasan en la Comunidad de Madrid tienen mucho que ver con esto", defendió Gordo, que denunció que la "insistencia en la privatización abre las puertas a la relación con la corrupción".
La portavoz de Salud del Grupo Socialista del Ayuntamiento de Madrid, Carmen Sánchez, afirmó a Europa Press que el servicio de Atención Primaria "se está degradando" en todos los centros sanitarios de la Comunidad. Además, consideró que el área única empeorará el servicio de la sanidad pública.
MANIFIESTO POR LA CALIDAD DE LA SANIDAD
Al término de la manifestación, apoyada por la Coordinadora de Equipos de Atención Primaria, la Plataforma 10 Minutos, la Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública de Madrid, Sindicato de Sanidad-CGT, las plataformas en defensa de la sanidad pública del Henares, de Rivas, Leganés, la Confederación Española de Consumidores y Usuarios (CECU), PSM-PSOE e IU, los manifestantes leyeron un manifiesto en la Puerta del Sol en el que se oponen al copago sanitario, el área única de salud o la entrada de capital privado en los centros sanitarios.
El escrito dice que, a pesar de los "ataques" que la presidenta regional, Esperanza Aguirre, ha perpetrado contra la sanidad pública madrileña, es "preferible a la alternativa privada", que convertiría a los usuarios en "clientes de una empresa multinacional".
"Ya hemos comprobado que la gestión privada supone despilfarro del dinero público en beneficio de las cuentas corrientes de muy pocos y en detrimento de los recursos y la calidad de los servicios públicos", indica el manifiesto, que pone como ejemplo que los madrileños pagan "hasta cinco veces más por los nuevos hospitales que si hubieran sido construidos y gestionados íntegramente por el Gobierno regional".
Además, indica que ese dinero "restará de la construcción de los más de 55 centros de salud que el Gobierno de la Comunidad de Madrid tenía comprometidos", así como de la contratación de los 1.800 médicos, 25.000 enfermeras y enfermeros y el personal administrativo necesario para hacer frente a las necesidades sanitarias de la ciudadanía.
Los vecinos defienden que esta desviación de dinero y recursos provocan el "deterioro del servicio y de las instalaciones, el aumento de las listas de espera, que ya están afectando a las citas con el médico de cabecera, y a la precarización de las condiciones laborales de los profesionales sanitarios".
Dentro de su manifiesto, se oponen también a la implantación del Área Única sanitaria, que eliminará las once áreas existentes en la actualidad en la región. A su juicio, esta ley "no es más que una medida administrativa dirigida a adaptar al sistema sanitario madrileño a las exigencias del mercado alejando los centros de decisión de la realidad cotidiana de los usuarios y erosionando gravemente la capacidad de una planificación que responda a las necesidades reales de la población", por lo que exigen la retirada del decreto y el rediseño, de manera consensuada con agentes sociales, de un nuevo mapa sanitario.
Asimismo, reclaman el desarrollo de un Plan Integral de Salud que contenga medidas urgentes dirigidas, entre otras cosas, a la reducción real de las listas de espera y se oponen a la ley 15/97 de Nuevas Formas de Gestión en la Sanidad, que permite la entrada de capital privado en la Sanidad.
"Es el suelo abonado para la transformación del sector público sanitario en una nueva y apetitosa cantera de negocios. Reivindicamos, por tanto, su derogación, así como una reforma de la Ley de Ordenación Sanitaria de la Comunidad de Madrid dirigida a garantizar una atención sanitaria de calidad y el carácter público de la sanidad madrileña", sostienen.
Por ello, consideran "necesaria" la construcción de los 28 centros de salud que, a su juicio, faltan para que se cumpla el compromiso del Gobierno regional de construir 55 esta legislatura; que se contraten 1.800 médicos y se doble el número de enfermeros y "una mejora sustancial de la dotación de recursos humanos y materiales a la Atención Primaria y Especializada".
"No vamos a aceptar que especulen también con nuestra salud. No vamos a aceptar que nos hagan pagar (o co-pagar) por un derecho que hemos conquistado y que nos pertenece. Las administraciones deben tomar ya las medidas oportunas para garantizar su carácter público, universal, gratuito y de calidad", concluyeron.