El Patio anuncia que llevará su causa al Pleno del Ayuntamiento de la capital
MADRID, 22 Ene. (EUROPA PRESS) -
La concentración de más de un centenar de personas esta mañana frente al edificio ocupado del Patio Maravillas, en el barrio de Malasaña, provocó que la Comisión Judicial encargada de ejecutar la orden judicial de desalojar el inmueble, que estaba prevista para las 9.00 horas de hoy, se haya visto obligada a posponerlo "por falta de medios y seguridad para llevarlo a cabo", según informaron hoy desde los Juzgados de Plaza Castilla a Europa Press.
Según señalaron desde los Juzgados, "ante las dificultades de proceder al desalojo del edificio", se decidió posponerlo "sine die". Asimismo, aclararon que la nueva fecha que determine el juzgado "tendrá que ser comunicada con antelación a los 'okupas' del inmueble".
Antes de saber que el desalojo no se iba a producir, durante la concentración, el portavoz del Patio, Toni, indicó que había 70 personas encerradas en el edificio para evitar la entrada de la policía y leyó un comunicado en el que denunciaron el estado de abandono en el que se encontraba el edificio desde 8 años antes de la llegada de los 'okupas', hace un año y medio. En el mismo sentido, explicó que desde su entrada vienen desarrollando centenares de actividades puntuales, así como decenas de actividades que se llevan cabo con regularidad.
En la misma dirección se pronunció la representante del Foro Social Mundial en Madrid, Janan, quien señaló que "lo que la Policía quiere desalojar es más que un centro social 'okupado', van a desalojar un taller de bicis, una asesoría laboral, un espacio para niños, una sala de ensayo, talleres de idiomas, arte, cuentos y vídeo, un comedor y una cafetería". "Quieren desalojar un espacio en que se han realizado miles de actividades, cientos de charlas, de conciertos y de debates", añadió.
En la concentración participaron miembros de diversas asociaciones de la capital como la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos (FRAVM), la Asamblea Ciudadana del Barrio de Universidad, el Comité Español de Ayuda al Refugiado (CEAR), ACIBU, SODEPAR; Médicos del Mundo, Ecologistas en Acción y el Foro Social Mundial, así como por el grupo político de Izquierda Unida.
ANTE EL AYUNTAMIENTO
Además, el portavoz de los 'okupas' recalcó que el inmueble, aún siendo privado, está calificado como "de dotación social", lo que significa, según dijo, que tiene que estar destinado a dar servicio a la comunidad y, "como sus propietarios no lo están cumpliendo", desde su colectivo solicitaron la expropiación del inmueble para destinarlo a fines sociales como el que ellos realizan. "El Consistorio tiene la potestad para expropiar este espacio y devolvérselo a la ciudadanía, pero nos costa que esta solicitud ni siquiera ha sido tramitada", agregó.
En este sentido, explicó que desde su colectivo pidieron la palabra a través de asociaciones de vecinos "amigas" para asistir el próximo lunes a la Junta Municipal, en la que aseguró que contarán con el apoyo del PSOE y de IU. Además, anunció que convocarán una manifestación para el próximo sábado en la Plaza Mayor, de cara a apoyar su causa.
El concejal de IU del Ayuntamiento de Madrid, Daniel Álvarez, explicó que desde su grupo querían evitar el posible desalojo porque "los derechos de propiedad no pueden estar por encima de los derechos sociales de los vecinos". "Ante la falta de equipamiento público que hay en el Barrio de Malasaña, la sociedad tiene la obligación de autorganizarse para ocupar los espacios públicos o privados", añadió.
Asimismo, el representante de IU en la concentración comentó que su grupo está estudiando llevar el caso del Patio Maravillas al Pleno Municipal.
Ante el comunicado enviado ayer por la empresa propietaria del edificio, Grupo 2 Reunidos S.L., en el que se aseguraba que el edificio nunca llegó a estar abandonado sino que era utilizado por las 'Obras Misionales Pontificias', el presidente de la Asociación de Vecinos de Malasaña, Antonio, subrayó que el responsable de la empresa, Leopoldo Arnáiz, "tuvo aquí a cuatro seglares haciendo propaganda para justificar que el edificio no estaba cerrado". "Aseguro, como vecino del barrio, que esto estaba cerrado hace más de 10 años", apostilló.