La Fundación Raíces dice que es, entre otras cosas, por no querer abandonar la lactancia materna
La Consejería aduce informes en los que expertos dicen que la joven tiene conducta agresiva y no sabe cuidar de su hija
MADRID, 6 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Fundación Raíces ha denunciado que el Instituto Madrileño del Menor y la Familia (IMMF) ha retirado la tutela de su bebé de 15 meses a una madre sin recursos que vivía hasta ahora en un centro maternal, ayudada por los Servicios Sociales. Mientras que la Fundación alega que es por amamantar a su hija, el Gobierno regional esgrime informes de expertos que hablan de su conducta agresiva y de la incapacidad de cuidar a la pequeña.
En concreto, fuentes de la Consejería de Familia y Servicios Sociales de la Comunidad de Madrid han explicado a Europa Press que se ha retirado de forma provisional la tutela de la menor porque la madre tenía conducta "agresiva" y no sabía cuidar de su hija, pero que en ningún caso tiene que ver con que le estuviera dando el pecho.
La organización denunciante, que ha elevado su queja ante el Defensor del Pueblo, ha explicado que según la resolución de desamparo, el IMMF ha asumido la tutela de la niña "quitándosela a su madre por razones como la falta de recursos económicos, la falta de apoyos familiares o el no cumplir con los objetivos de un programa de psicoterapia y habilidades maternales".
"Desde el IMMF se nos informó que la retirada se produjo por no llevar a cabo el programa que tenían previsto para ella y para la niña que, fundamentalmente consistía, en suspender la lactancia materna por considerarla 'caótica y perjudicial para los niños y niñas'", dicen desde la Fundación.
Ahora, explican, al no contar ya con la tutela, ya no está en el centro, y, además, se les ha informado de que no le van a permitir a la madre darle el pecho a su hija en las visitas "porque está prohibido el amamantamiento en los centros o residencias infantiles en la Comunidad de Madrid, ya que es contrario a la institucionalización de la niña, que pretende una desvinculación de madre e hija".
Desde la Consejería que dirige en funciones Engracia Hidalgo explican que llevan trabajando con esta joven desde marzo de 2010 y han negado que se haya retirado la tutela de la menor a la madre porque diera el pecho a su hija sino porque varios informes de los centros por los que ha pasado explican que la mujer tiene una "conducta agresiva" y no atiende como debe a la pequeña.
Así, entre otras cosas, el mismo centro donde la madre estaba en un principio emitió un informe en el que se explicaba que la mujer tenía una actitud "muy negativa y conflictiva" y, que entre otras cosas, agredía a sus compañeras. Además, carece de apoyo familiar y presenta "inestabilidad mental".
Según explican, a las madres se les establece unas pautas psicosociales con el objetivo de que las cumplan, algo que en este caso no se hace. Entre otras cosas, señalan que la alimentación que recibía la pequeña no era la adecuada porque aunque no se meten en el hecho de que siga con la lactancia materna o no, se le aconseja que tiene que tener unos complementos que, según los informes, la menor no estaba recibiendo.
En resumen, dicen desde la Consejería, los informes en los que se ha basado el Instituto para retirar la tutela de la menor a su madre, aparecen un conglomerado de cuestiones que oscilan desde el comportamiento de la madre (en algunos casos hablan de "cierto grado de inmadurez porque no cuida a su hija adecuadamente") hasta que la niña no va aseada o no tiene una disciplina alimentaria.
También señalan que la propia joven acudió el 20 de abril a un centro médico para pedir, por decisión propia, unas pastillas que le retiraran la leche. Sin embargo, algunas personas cercanas a la afectada dicen que al darse esta situación en la que madre e hija no pueden verse, la joven está "con los pechos congestionados de leche, al borde de la mastitis".
La retirada de la tutela es una decisión provisional y la madre puede trabajar con los servicios sociales con el fin de reinsertarse y poder recuperar a su hija. Desde la Fundación explican que ahora la chica ha sido amparada por una fundación de ayuda humanitaria, que le ha dotado de alojamiento, manutención y apoyo jurídico.