La Policía logra en una apenas hora desalojar la Puerta del Sol por completo y todas las calles adyacentes
MADRID, 13 May. (EUROPA PRESS) -
El desalojo por parte de la Policía Nacional en la Puerta de Sol de Madrid se ha saldado con 18 manifestantes detenidos y dos agentes heridos leves, según ha informado a Europa Press la Dirección General de la Policía, a la que no le consta que haya heridos entre las personas que, pasadas las 4.30, permanecían en la plaza. El SAMUR no ha tenido que realizar ninguna intervención tras el desalojo, según estas mismas fuentes.
La Policía asegura que no se han registrado incidentes graves y que no se ha realizado acampadas en ninguna ciudad española.
La Policía Nacional ha desalojado por completo en apenas una hora la Puerta del Sol de Madrid y los principales accesos a la plaza, sacando del lugar a varias decenas de personas que, minutos antes de las 5.00, aún permanecían en el recinto.
En torno a las 4.40 horas, varias decenas de furgones de la Unidad de Intervención Policial accedieron a la plaza y los agentes procedieron a establecer un cordón en torno a las personas que permanecían en el lugar, instándoles a abandonar la zona, según han relatado a Europa Press varios de los presentes en ese momento.
En el marco del desalojo, varias personas, que opusieron resistencia, fueron detenidas. Alguno de ellos permaneció durante varios minutos en el suelo y esposado con las manos en la espalda. Durante todo el proceso, la Policía ha procedido también a realizar numerosas identificaciones.
TENSIONES EN LOS ALEDAÑOS A SOL
Esta intervención policial desató algunos momentos de tensión en los que se profirieron gritos de 'Policía asesina' por parte de los manifestantes. El mismo escenario de tensión se dio ya pasadas las 6.00 de la madrugada, ya en plena Gran Vía, cuando los agentes antidisturbios han introducido a varios detenidos en un furgón policial. Esta actuación generó los aplausos de los presentes hacia los detenidos y más gritos contra la Policía que llegó a cortar el paso de los transeúntes en una de las aceras de la Gran Vía.
A las 5.30 de la madrugada, la presencia en la plaza consistía en varias decenas de furgones de los antidisturbios y los servicios de limpieza del Ayuntamiento de Madrid, así como el helicóptero de la Policía que, durante todo el desalojo, permaneció sobrevolando la zona.
Una vez desalojada la plaza, la Policía procedió también a despejar las principales calles de acceso y expulsar a los manifestantes, algunos de ellos portando material de acampada como sacos de dormir que todavía permanecían en la zona.
Los agentes llegaron a advertir a los presentes que, en caso de permanecer en la zona, se les tomaría nota de su documentación para interponer la correspondiente sanción ante la Delegación de Gobierno que había fijado las 22.00 como límite horario para las concentraciones. Esto logró que, pasadas las 5.30 horas, las principales calles que dan acceso a la plaza como Preciados, El Carmen, Montera o Arenal, fueran despejadas.
Tan solo un grupo de unas veinte personas permanecieron en la calle Tetuán (entre las calles Preciados y El Carmen) profiriendo gritos contra la Policía. Pero minutos después, también fueron evacuados.
La presencia policial se hacía notar en todos los aledaños de la plaza donde los agentes establecieron controles que impedían el paso a cualquier persona, incluyendo a los medios de comunicación.
En torno a las 6.30 de la mañana, la actividad se centraba en la Gran Vía, donde había numerosos furgones de los antidisturbios y los pocos manifestantes que aún permanecían en el lugar se mezclaban ya con las personas que salían de los lugares de ocio situados en la zona de la Gran Vía.