MADRID 19 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Grupo Trapote, propietario del inmueble que albergaba hasta ahora la denominada discoteca Pacha, ha indicado este viernes que el local sigue con su actividad de ocio pero que adopta ahora la denominación de Teatro Barceló.
En un comunicado, el grupo hostelero Trapote ha aseverado que en agosto de 2012 se desvinculó de este emblemático edificio de la marca Pacha para iniciar con ello un nuevo proyecto. En este sentido, indica que desde esa fecha se recuperó el nombre original de Teatro Barceló y se siguió ofreciendo una oferta de ocio ininterrumpida a los clientes de la ciudad de Madrid.
"No hemos cerrado la Sala, muy al contrario nos reafirmamos en que nuestra valiente decisión ha sido acertada comprobando cada día las colas de clientes que aguantan pacientemente en la calle para poder entrar en nuestra Discoteca Teatro Barceló", han indicado desde el Grupo Trapote.
En 1996, el empresario Pedro Chapote adquirió el inmueble que albergaba la discoteca en régimen de franquicia, es decir, que se le concedía la explotación de la marca Pacha, según ha explicado a Europa Press un portavoz del Grupo Pacha.
No obstante, por diferencias de gestión se ha dado por terminada la relación contractual y de hecho, desde hace meses, ya no estaba en el local las características 'cerezas' que simbolizan la marca Pacha.
Además, el mismo portavoz remarca que el grupo que dirige Ricardo Urgell no renuncia a tener un local Pacha en Madrid si se presenta un proyecto "interesante" o "atractivo". "Lo que ha terminado es esta relación de franquicia", ha agregado.
Por otro lado, el director de Franquicias del Grupo Pacha, Hochi Raad, ha manifestado que simplemente se ha terminado la relación contractual con Trapote, al que ha definido como un "excelente empresario" con el que han desempeñado una buena colaboración "durante muchos años" para el desarrollo de la franquicia.
En este sentido, Raad ha enfatizado al respecto que no existe ningún problema con este empresario y que únicamente se ha dado por concluida el contrato de franquicia por la voluntad de abrir una "nueva etapa" para ambas partes.