Ecologistas pide la demolición de un muro de hormigón que separa el río Henares de la ciudad en Nueva Alcalá

ALCALÁ DE HENARES 18 Ago. (EUROPA PRESS) -

Ecologistas en Acción ha exigido al Ayuntamiento de Alcalá de Henares la "inmediata demolición" del muro de hormigón que el Consistorio está construyendo junto al río Henares en el denominado Paseo Fluvial de Nueva Alcalá por considerarlo "un despropósito, un despilfarro y una seria agresión al medio ambiente".

Y es que para la asociación ecologista, ese muro, lejos de proteger el río, lo que hace es separar el río de la ciudad y limitar la vegetación ribereña.

"La idea del muro no es nueva. Esta obra se encontraba prevista en el denominado Proyecto de Acondicionamiento del Río Henares a su Paso por Alcalá de Henares promovido por la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT)", recuerdan desde Ecologistas.

Además, explican que si en su momento no se llevó a cabo fue porque "el entero proyecto se encuentra aún pendiente de la obligatoria Declaración de Impacto Ambiental (DIA), sin saber si va a ser positiva o negativa".

"Sin embargo, ahora nos encontramos con la construcción del muro, promovida por el Ayuntamiento de una manera sorprendentemente expeditiva, sin haber consultado previamente con los vecinos, sin contemplar otras posibilidades, ni haber obtenido los imprescindibles permisos medioambientales. Es, por lo tanto y salvo que se demuestre lo contrario, una obra fuera de la legalidad", ha asegurado el portavoz de Ecologistas en Acción, Ezequiel Merino.

Ecologistas en Acción recuerda además que el río Henares está catalogado como Lugar de Interés Comunitario (LIC), una figura que protege la zona debido a su elevado valor natural, por lo que para actuar en las márgenes del río "se ha de contar con los pertinentes permisos". Desde Ecologistas hablan incluso de "muro de la vergüenza" y ya han pedido por escrito al Ayuntamiento su demolición.

"Se han talado algunos árboles, dañado las raíces de otros, se están generando escombros, ruidos y alterando vegetación y fauna. Al mismo tiempo, se está separando de manera brutal el río de la ciudad, con un muro de la vergüenza. Al ocultarlo de la vista, se facilita la acumulación de basuras al otro lado de la barrera. Nos causa profunda tristeza ver, una vez más, el carácter urbanizador de nuestro Ayuntamiento", ha reprochado Merino.

A su juicio, el Ejecutivo complutense "prefiere mirar a otro lado, tapando lo que les molesta, en este caso, el río, antes que vigilar, cuidar y limpiar, tarea en la que fracasa estrepitosamente". "Pareciera que toda su pretensión fuese alicatar el río, encorsetarlo entre muros, urbanizarlo, reducirlo a la mínima expresión y tratarlo como si de una triste calle gris se tratara", ha afirmado.