Achaca la caída de este proyecto inmobiliario a la "codicia y al afán especulativo"
MADRID, 23 Abr. (EUROPA PRESS) -
"El dinero lo ganan todos aquellos que, con paciencia y fina observación, van detrás de los que pierden". Con esta cita literaria de Benito Pérez Galdos, el ex concejal de Urbanismo en el Ayuntamiento de Madrid Jesús Espelosín narra en las 529 páginas que componen el libro 'Operación Chamartín' "el auge, la caída y el fracaso" de este "intento de pelotazo" que veinte años después de "especulaciones" se ha quedado en "ni una sola realización urbanística".
Acompañado por el presidente del PSM y exalcalde de Madrid, Juan Barranco, y Miguel Ángel de Rus, este ingeniero de caminos que fue concejal de Urbanismo con los alcaldes madrileños Enrique Tierno Galván y Barranco relata en el libro cómo se gestó este proyecto urbanístico-inmobiliario en Madrid "a costa de la expropiación de terrenos" y cómo se convirtió en la "bestia negra" de las Administraciones del PP.
El relato cuenta con protagonistas como "exsocios de algún ministro de Fomento que actuaron de intermediarios", el expresidente de la Comunidad de Madrid y actual ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, y el exministro de Fomento Arias Salgado. Frente a ellos, se encuentran los herederos de las familias expropiadas.
En la presentación, Barranco ha destacado como componentes del libro "la defensa del honor" de su propio autor, similar a como lo hicieran escritores del Siglo de Oro español para defenderse ante las acusaciones que le achacaron como el problema fundamental de este proyecto, y el propósito de denuncia para esclarecer unos hechos ocurridos en la capital y que a día de hoy siguen ocupando titulares en la prensa regional.
"Esta operación nació como el proyecto urbanístico más grande de toda Europa y veinte años después ha quedado en nada. La montaña parió al ratón", ha aseverado el socialista, quien ha recordado su lucha por frenar esta operación en la que llegó a acusar a Arias Salgado de prevaricación por ocultar supuestos informes contrarios a la puesta en marcha de este proyecto.
Según Barranco, "la codicia y la gran chapuza que se hizo están detrás del fracaso de esta operación urbanística". Y a su juicio, supuso una muestra más de "que al frente de las Administraciones públicas se coloca a personas que no creen en lo público, pero sí en lo privado".
REVERSIONISTAS
En el libro, según ha explicado Espelosín, el autor narra todo un proceso en el que DUCH (Siglas que corresponden a Desarrollo Urbanístico de Chamartín SA), empresa formada por BBVA y Constructora San José, se hace con el concurso público de RENFE para urbanizar la zona.
El suelo tenía entonces una capacidad edificadora de 187.358 metros cuadrados. Y ahora tiene un aprovechamiento neto de 1.855.521 metros cuadrados, pero "muy poco futuro", según ha dicho el exconcejal.
Al mismo tiempo, su autor relata la lucha de los herederos de los antiguos expropiados que trataron, recurriendo a la Ley, de Participar en las plusvalías de la operación, aunque fuera en modesta proporción.
Ahora, insiste en que los conocidos como reversionistas solo "pretendían que se les reconociera el derecho legal a las plusvalías sobre unos terrenos que habían sido expropiados con un fin y que, porteriormente, habían cambiado de uso".
Asimismo, el exconcejal narra cómo se convirtió en la "bestia negra" de las Administraciones del PP, que le llegaron considerar el principal problema de la operación Chamartín, tal y como afirmó Gallardón en sede parlamentaria.
También reflexiona en el libro sobre las razones que han llevado a que a día de hoy el proyecto esté muerto y se pregunta por qué la constructora no ha sacado adelante la operación.
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