Cree que así continúa "la política urbanística neoliberal mantenida por anteriores gobiernos, al priorizar el lucro residencial"
MADRID, 7 Dic. (EUROPA PRESS) -
Ganemos Madrid, que forma parte de Ahora Madrid, ha exigido al Ayuntamiento de Madrid la paralización de la demolición del Taller de Precisión de Artillería, situado en la calle Raimundo Fernández Villaverde, en el distrito de Chamberí, después de que se haya autorizado su derribo, ha informado el colectivo en su página web.
La plataforma municipalista ha denunciado que con este derribo continuaría "la política urbanística neoliberal mantenida por anteriores gobiernos, al priorizar el lucro residencial sobre la protección patrimonial de un edificio histórico". Y por ello, si sigue adelante, emprenderían acciones legales para lograrlo, poniéndose para ello a disposición de los colectivos vecinales, ecologistas y de defensa del patrimonio.
El colectivo cree que "no existen razones" para conceder la licencia que permite derribar el histórico edificio del TPA, puesto que, a su juicio, "no está aprobado el Convenio de Gestión necesario para poder edificar las nuevas construcciones. También ha apelado a no hacerlo por "prudencia", ya que "existen abiertos varios frentes judiciales en la Fiscalía y en el Tribunal Superior de Justicia de Madrid que podrían anular la operación urbanística".
"Entendemos que esta operación especulativa, mal planteada desde que en 1997 se recalificase la parcela de uso público perteneciente al Ministerio de Defensa a uso lucrativo residencial -multiplicando así la edificabilidad- supone una complicada herencia que debe ser solucionada en términos muy distintos a los que actualmente se mantienen desde el Área de Desarrollo Urbano Sostenible", ha señalado la plataforma.
EDIFICIO PROTEGIDO
El Taller de Precisión de Artillería es un edificio que data de 1899 y figura con el número 25075 en el Catálogo de Edificios del actual Plan General de Ordenación Urbana de 1997, con nivel de protección Remitida (lo que significa que su grado de protección queda supeditado a la concreción en el mencionado Plan Parcial).
Según la plataforma, esta protección fue "obviada" en la tramitación del Plan Parcial, pese a cumplir con criterios que avalarían su protección. Así, cita seguidamente el hecho de que tenga "más de cien años de antigüedad", valor arquitectónico por su estilo neomudéjar, ser el edificio de hormigón armado más antiguo de Madrid y contar con un jardín con árboles centenarios.
También cumple con los requisitos del Plan Nacional de Patrimonio Industrial. De hecho, estuvo incluido con nivel de protección Estructural hasta en tres Catálogos anteriores (1977, 1980 y 1985), sin que se justificase su cambio a protección Remitida en el de 1997.
El colectivo ha explicado que el plan de racionalización en la administración pública del PP facilitó en 2014 la venta de este inmueble, que era propiedad del Ministerio de Defensa. Sin embargo, para poder materializar los planes inmobiliarios del nuevo propietario del terreno, era preciso que el Ayuntamiento aprobase un Plan Parcial que permitiera la eliminación del conjunto histórico.
Así, ha agregado que es por esto que hace "poco más de un año se convocó un pleno extraordinario donde se evidenciaron las distintas opiniones que este tema suscita en el grupo municipal de Ahora Madrid al votar seis de sus concejales en contra del documento, en línea con la posición de las asociaciones vecinales, ecologistas y de defensa del patrimonio".
RECURSOS JUDICIALES
Gracias a la acción de estos colectivos existen dos recursos judiciales contra este Plan Parcial abiertos en el TSJM, así como una investigación de la Fiscalía. Según la plataforma, el tribunal aún no se ha pronunciado sobre la legalidad de este Plan ni, en definitiva, sobre la demolición de un edificio que podría catalogarse como patrimonio histórico.
"El siguiente requisito, tras el Plan Parcial, pasa por la aprobación en pleno de un Convenio de Gestión en el que se defina con mayor precisión la parcelación resultante, antes de la concesión de las licencias de edificación", ha dicho.
A continuación, ha recordado que el concejal del Área de Desarrollo Urbano Sostenible se comprometió al aprobar el Plan Parcial a recoger las reclamaciones vecinales en este Convenio, que aún no se conoce.
Sin embargo, añade el colectivo, pese a que el Convenio aún no se ha aprobado y no se podrían construir los nuevos edificios, los nuevos propietarios solicitaron la licencia de demolición de los edificios existentes.
"Consideramos que la única motivación posible de esta petición es destruir los edificios históricos antes de que los tribunales puedan reconocer su protección y, por tanto, frustrar la operación inmobiliaria", ha denunciado el grupo.
Ganemos Madrid ha destacado que, de producirse, esta demolición, el Ayuntamiento de Madrid estaría continuando "la política urbanística neoliberal mantenida por anteriores gobiernos, al priorizar el lucro residencial sobre la protección patrimonial de un edificio histórico y sobre los beneficios que el aprovechamiento público y dotacional tendría para quienes habitan Madrid".
Asimismo, ha subrayado que entienden que el gobierno municipal tuvo cierto margen de maniobra para solucionar esta situación en términos bien diferentes a la hora de redactar el Plan Parcial, pero sobre todo tiene margen para impedir la demolición hasta que el tribunal se pronuncie sobre las alegaciones presentadas en cuanto a la protección del edificio.
"No hay razones para comenzar de manera urgente una demolición, ya que no podrían construirse los nuevos edificios hasta que no se apruebe el Convenio de Gestión y se levante (o no) la imposibilidad de demoler el subsuelo", ha indicado.
En caso de no paralizarse la demolición, Ganemos Madrid ha avisado de que no descarta ejercer las acciones legales necesarias para lograrlo, poniéndose para ello a disposición de los colectivos vecinales, ecologistas y de defensa del patrimonio.