MADRID, 25 (EUROPA PRESS)
El presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, ha puesto este lunes de ejemplo a Madrid frente al Gobierno "opaco" del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que "no ha ganado elecciones, no es diputado, ha faltado a su palabra de disolver las Cámaras y cuyo Gobierno camina a rumbo desconocido".
En los Desayunos Informativos organizados por Europa Press, Garrido ha criticado que Sánchez no ha expuesto a la ciudadanía ni al Congreso "un programa político definido". "Esto suscita inquietud, porque nos encontramos ante una total falta de transparencia", ha remarcado.
Dicha "opacidad" se vuelve, para el presidente autonómico, "más grave aún por el hecho de que, además de no conocer un programa público de gobierno" tampoco se conoce el programa oculto que Pedro Sánchez "ha negociado con los radicales que le han dado la llave de la Presidencia".
MADRID, "ESPACIO DE CONFIANZA Y ESTABILIDAD"
Y es que, a su parecer, lo razonable hubiera sido plasmar esos pactos, "con luz y taquígrafos", en un Acuerdo de Investidura que los españoles pudieran conocer y valorar. "No se ha hecho así, al contrario del modo en que hicimos las cosas en Madrid. A diferencia de la situación que atraviesa nuestro país, Madrid sí es un espacio de confianza, de estabilidad y de seguridad", ha dicho.
Así ha incidido en que Madrid, a la que le toca "tirar del carro", es "una potencia regional lejos del discurso disgregador que mueve al populismo radical y xenófobo, ya sea en otras partes del mundo, o en una parte de España, la presidida por el soberanismo".
Y es que el dirigente autonómico considera que en España sin reformas "el populismo no dejará de crecer". En este punto, ha incidido en que en dicho populismo en el país ya se ha hecho un hueco, "a la izquierda y a la derecha y de modo notable en Cataluña". "Estos movimientos han sintonizado con la inquietud de las clases medias a raíz de la crisis económica y de problemas concretos como el de la corrupción", ha dicho.
Así, Garrido ha vuelto a resaltar que Madrid pone "todas sus posibilidades al servicio del proyecto compartido de convivencia y de progreso" de España, para "acercar y no para separar".
En este punto, ha ensalzado las políticas que se han llevado a cabo en la Comunidad, "resultado del apoyo a los emprendedores, de la renuncia al intervencionismo económico, y de la apuesta por los servicios públicos como factor de competitividad y de cohesión social". "No concibo trabajar para Madrid si no estoy trabajando también para España", ha dicho.
Así, ha defendido que esto se traduce "en una lealtad institucional hacia las demás regiones y al Gobierno de España, sea cual sea su color ideológico", así como en "una actitud y un discurso comprometidos y vigilantes, que van a defender, siempre, la unidad de España y la igualdad de derechos y deberes de los españoles".