MADRID 22 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Grupo Municipal de Izquierda Unida defenderá en el Pleno extraordinario de presupuestos que se celebrará mañana en la Casa de la Villa que es posible otro diseño de las cuentas públicas, con ahorros por encima de los 481 millones de euros, y poniendo la mayor carga fiscal en las rentas más elevadas.
Así lo explicó el portavoz de Hacienda de IU, Daniel Morcillo, en declaraciones a Europa Press, para adelantar que la coalición de izquierdas presentará una enmienda a la totalidad al presupuesto. En el diseño hecho por IU, la política de ingresos "pasa por cobrar más a quien más tiene" y la de gastos se basa en la "eliminación de los innecesarios" y en la apuesta por el reequilibrio territorial, en los barrios y en los vecinos.
Morcillo matizó que esos 484,80 millones de euros que saldrían de dar un tijeretazo a programas prescindibles se obtendrían de la reducción de gastos en seguridad privada (21 millones), alquiler de coches (6,5 millones), arrendamiento de edificios (29,4), publicidad (5,7), estudios y trabajos técnicos (52,1), órganos directivos (13), atenciones protocolarias (0,1), Madrid Global (7,9) y M-30 (345,8).
A VUELTAS CON LOS CAJEROS AUTOMÁTICOS
En cuanto a las enmiendas a las ordenanzas fiscales, Morcillo adelantó que serán una reedición de las presentadas el año pasado. Ése es el caso de la demandada Tasa de Cajeros Automáticas, esto es, un gravamen por el uso que las entidades bancarias haden de la vía pública. Con ella el Ayuntamiento podría conseguir hasta 1,5 millones de euros más de ingresos. También abogan por la creación de una Tasa Turística, que aportaría a las arcas municipales 16,5 millones de euros, y por otra de Partículas para los constructores, por valor de 30 millones.
También pedirán modificaciones en el Impuesto de Actividades Económicas (para lograr 17 millones de euros más), en el de Vehículos de Tracción Mecánica (6,4 millones), en el Impuesto de Bienes Inmuebles (441,2 millones) y en la Tasa de Terrazas (22 millones).
En cuanto a la de Basuras, IU defiende modificaciones, que supondrían 34,6 millones de euros más para el Ayuntamiento pero, eso sí, centradas en los grandes generadores de residuos, como los centros comerciales o la industria, y todo para que los vecinos "paguen menos".
En definitiva, se trata de crear tasas nuevas para cobrar fundamentalmente "a los causantes de la crisis y modificaciones de las actuales para bajar las contribuciones de los madrileños".
SALIDA SOCIAL A LA CRISIS
Bajo el lema 'Por una salida social a la crisis', IU critica su modelo de presupuestos, diametralmente opuestos a los elaborados por el equipo del delegado de Hacienda, Juan Bravo, ya que consideran que con ellos la crisis "la pagan los ciudadanos con menos servicios y menos inversión", al tiempo que "no apuestan por el cambio del modelo productivo" y son "incapaces de resolver el endeudamiento, que es la soga de la ciudad". Además, la pretendida austeridad "se concentra en la ausencia de nuevos equipamientos sin cuestionar otros gastos innecesarios, como los 37 millones de euros del Palacio de Cibeles".
Mención aparte merecen los "ingresos volátiles" que ha calculado el equipo de Juan Bravo. En este sentido destacan los 147,6 millones de euros que el Gobierno local espera obtener por la venta del suelo, los 301,7 en multas y los 21 con la Tasa de Telefonía Móvil. En este sentido, la coalición de izquierdas señaló en relación a la tasa de las empresas de móviles que se trata de un ingreso que está en el aire por el recurso del sector, a lo que suman que el PP siga apostando por el ladrillo como fuente de ingresos. "No han entendido las causas de la crisis", apuntaron.
Las críticas de IU también llegaron a la relación entre el Ayuntamiento y las empresas privadas. Y es que los gastos de servicios prestados por terceros pasaron de representar el 33,6 por ciento en 2003 al 40 por ciento en 2009.
IU aboga, entre otras cuestiones, por la descentralización del presupuesto destinando el 25 por ciento a las Juntas Municipales, por la construcción de equipamientos, por la rehabilitación de viviendas y por la remunicipalización de los servicios privatizados.