MADRID 8 Abr. (EUROPA PRESS) -
Las Asociaciones de Padres y Madres (AMPA) de los colegios públicos Plácido Domingo y Tirso de Molina, en el distrito madrileño de Arganzuela, entregarán esta tarde, a las 16.30 horas, en el registro de la Agencia Tributaria del Ayuntamiento de la calle Hierro, otras 800 firmas contra la instalación de antenas cerca de los centros escolares, en concreto, en el edificio de Larcovi de la calle Ónice.
Según han explicado los padres, estas firmas se unen a las 1.200 recogidas contra el mástil de una compañía de telefonía en el mismo edificio. Ya entonces las familias criticaron que el "alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón; la presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre; y el ministro de Industria, Miguel Sebastián, anteponen los beneficios de la industria a la salud" de sus hijos.
Ante el anuncio de que dos empresas de telefonía móvil pretenden instalar antenas a escasos metros de los colegios Plácido Domingo y Tirso de Molina en Arganzuela, las asociaciones de madres y padres de dichos colegios, así como la asociación vecinal Planetario, exigen tener la misma protección frente a las radiaciones electromagnéticas que los habitantes de Leganés, Castilla-La Mancha, San Luis (Baleares) o Molina de Segura (Murcia).
Estas localidades han disminuido las radiaciones a los niveles recomendados por la comunidad científica independiente y, en algunos casos, han prohibido instalar antenas a menos de 200 metros (San Luis) o 300 metros (Málaga, Molina de Segura) de los centros escolares.
"Existe suficiente evidencia que confirma la especial vulnerabilidad de los niños a las ondas electromagnéticas y la necesidad de alejar las antenas de los centros escolares, tal como recomienda el Parlamento Europeo en su resolución de 2 de abril de 2009", apuntan.
En un comunicado, señalan que tanto Gallardón como Aguirre "afirman no tener competencias para regular la ubicación o las emisiones de las antenas". A su juicio, "podían haberlas asumido, tal como han hecho otros municipios y comunidades autónomas, pero han preferido dejar vía libre a las operadoras para seguir pisoteando la salud de la población infantil".
Asimismo, critican que el ministro de Industria "hace oídos sordos a las advertencias de la comunidad científica internacional y cada vez se lo pone más fácil a las operadoras". Indican que su Ministerio ha eliminado los controles sobre los niveles de exposición de las antenas que se instalan en el interior de oficinas, casas y estaciones de metro (orden ITC/749/2010).
Además, apuntan que durante su mandato no ha rebajado los límites "tan permisivos" de radiación recogidos en el Real Decreto 1066/2001 sobre protección de la salud frente a los campos electromagnéticos. "Se trata de un decreto obsoleto porque, entre otras razones, se aprobó para desarrollar una norma ya derogada, la ley de telecomunicaciones de 1998", añaden.