MADRID 4 Abr. (EUROPA PRESS) -
El paseo de la Castellana, desde la plaza de Colón hasta la calle del Marqués de Riscal, acoge desde hoy una exposición de la artista Sophia Vari con el título 'Sophia Vari, forma y color', ha informado el Ayuntamiento de Madrid en un comunicado.
La concejala del distrito, Isabel Martínez-Cubells, acompañada por la propia artista ha inaugurado esta mañana la muestra que se compone de 15 magníficas esculturas en las que los planos y las curvas definen volúmenes armónicos y monumentales.
La propia artista lo ha dicho así: "Con estas esculturas se pretende tomar la geometría, el volumen y las formas para humanizarlas en el espacio".
Nacida griega, pero de formación cosmopolita, Sophia Vari, se inició como pintora, siguiendo las grandilocuentes escenas y majestuosas figuras del pintor flamenco del barroco, Pieter Paul Rubens.
Su incansable búsqueda para encontrar un medio de expresión con menos limitaciones que la pintura, la llevó al campo de la escultura, con una voluntad firme de dar respuesta a una exigencia interior no alcanzada hasta entonces.
Según sus propias palabras "la pintura es una ilusión, un trompe d'oeil: yo quería tocar, quería volumen. Quería poder girar alrededor de la obra, darle forma en el espacio, sentir que aquello que había creado existía de verdad".
Esta evolución vital, después de años de estudio e investigación, primero en Atenas, más tarde en Londres y finalmente en París, permitieron a Sophia Vari iniciar un nuevo recorrido artístico. Gracias a la escultura ha conseguido encontrar el catalizador para la expresión ideal de su propia creatividad, plasmando la materia y dándole la forma concebida en su mente.
El punto de inflexión que marcó su evolución artística fue su encuentro en 1969 con Henry Moore. Las obras del gran escultor británico le impactaron en la armonía de las formas y sobre todo en su monumentalidad.
Sus primeras esculturas figurativas de la década de los setenta, dieron paso al descubrimiento de la estructura de los planos y de la monumentalidad. Una contemplación relajada y reflexiva de la obra de Vari, permite apreciar la incorporación de planos a las formas redondas para alcanzar una integración armónica con nuevos ideales estéticos.
En sus piezas escultóricas ha sabido integrar lo mental y lo físico, lo cerebral y lo sensual, lo plano y lo volumétrico, dándole vida, elegancia y placer a un medio que, demasiado a menudo, tiende a ser estático.
Una vez más Madrid acoge la obra de un artista de prestigio internacional, convirtiéndose en un lugar de encuentro cultural y artístico y obsequiando a los ciudadanos con una oportunidad única de disfrutar durante los meses de abril a septiembre de un paseo de arte.