MADRID 5 Abr. (EUROPA PRESS) -
Personal administrativo de la Consejería de Familia y Asuntos Sociales de la Comunidad de Madrid se ha desplazado hasta el centro ocupacional Magerit para hacer entrega de una orden de desalojo a las personas que se encuentran encerradas desde hace casi un mes para protestar por su cierre sin que hayan querido aceptarla.
Fuentes de la Consejería han confirmado a Europa Press que este hecho se produjo el pasado viernes 1 de abril y en atención a los motivos de seguridad que llevaron a la Comunidad de Madrid a cerrar el centro ocupacional y trasladar a sus usuarios a otros lugares.
"No quisieron recepcionar ni firmar la orden de desalojo, por lo que estamos viendo otras vías de actuación jurídica", ha precisado un portavoz de la Consejería.
Por su parte, los familiares y usuarios del Magerit han explicado que fueron dos las personas que acudieron al centro con esta orden de desalojo y han asegurado que en dicha orden les daban un plazo de cinco días para abandonar las instalaciones.
"En caso de que el desalojo se lleve a efecto en los próximos días seguiremos realizando nuestras asambleas en la calle, en la plaza de Oporto", han adelantado.
Además, los afectados han convocado una nueva manifestación que tendrá lugar el próximo 13 de abril entre la plaza de la Villa y la Puerta del Sol.
UN MES DE ENCIERRO
Los familiares y usuarios de los centros ocupacionales cerrados por la Comunidad de Madrid con un preaviso de 48 horas (Magerit, Fray Bernardino y Centro de Atención a Discapacitados Psíquicos de Arganda) cumplen este viernes un mes de encierro para protestar por esta medida.
"El viernes 8 de abril se cumple un mes y seguimos manteniendo la misma situación sin que parezca que la Consejería de Familia y Asuntos Sociales esté dispuesta a dar marcha atrás. Sólo nos queda resistencia", ha manifestado a Europa Press el portavoz de la plataforma de afectados, Luis Álvarez.
Hace un mes que la Comunidad de Madrid avisó a los profesionales de estos centros y a los familiares de los usuarios de la necesidad de hacer un traslado urgente que se produjo sólo unos días más tarde para "garantizar su seguridad" ante los problemas estructurales que se habían detectado.
Desde entonces, estos familiares y usuarios mantienen este encierro en el Magerit para protestar por esta decisión. La Comunidad de Madrid y los sindicatos UGT y CC.OO. han creado una Comisión Mixta de Seguimiento para abordar este asunto.