PSOE dice que el cierre de centros ocupacionales ha provocado el traslado de 72 ancianos de la residencia de Carabanchel

La consejera cree que se ha actuado con "eficacia" en el cierre de los centros ocupacionales

MADRID, 17 Mar. (EUROPA PRESS) -

La diputada socialista Pilar Sánchez Acera ha denunciado este jueves que el cierre de los centros ocupacionales que ha clausurado la Comunidad de Madrid para "garantizar la seguridad" de usuarios y trabajadores ha supuesto el traslado de 72 ancianos de la residencia de mayores de Carabanchel.

"Son 72 mayores que fueron trasladados de su plaza de un día para otro, con un aviso mínimo el día anterior y por la incapacidad del gerente del Servicio Regional de Bienestar Social a la hora de resolver esta cuestión", ha denunciado Sánchez Acera.

Según ha dicho, "la Comunidad decide cerrar tres centros y, de la noche a la mañana, 72 personas desaparecen de allí con todo el estrés y controversia que les provoca" y con "algún tipo de incidencia" que, a su juicio, ha habido que lamentar.

Por su parte, la consejera de Familia y Asuntos Sociales, Engracia Hidalgo, ha reconocido durante la sesión del Pleno que el traslado de estos 72 mayores ha estado directamente relacionado con el cierre de los centros ocupacionales.

No obstante, ha asegurado que "el traslado se hizo en unidades medicalizadas". "Esta mañana hemos estado hablando con los directores y no ha habido ninguna incidencia y ni una sola queja sobre el traslado de los mayores", ha añadido.

SE HA ACTUADO CON "EFICACIA"

La consejera ha respondido a dos preguntas parlamentarias formuladas por IU y PSOE sobre este asunto con los miembros de la plataforma de afectados sentados en la tribuna del público de la Asamblea de Madrid. Ambos grupos han denunciado que no existía tal necesidad de cerrar los centros de forma inminente.

Hidalgo ha hecho alusión al informe conocido este jueves en el que el Ayuntamiento de Madrid corrobora los motivos del cierre y añade una nueva incidencia más en uno de los centros, el Fray Bernardino.

Además, ha asegurado que el cierre ha perseguido tres objetivos: "garantizar la seguridad, el servicio público con respeto a los usuarios y mantener los puestos de trabajo de todos". "Creo que hemos actuado con eficacia y con transparencia. Hemos intentado minimizar las molestias y hemos escuchado a todas las personas", ha añadido.

La consejera ha dado las gracias a los implicados por su "comprensión" y se ha referido a la "minoría" sentada en la tribuna de público, que ha cuantificado en 30 de las 300 familias. "No se han sentado a escuchar", ha dicho, al tiempo que ha reconocido que "ayer se tendió un puente de comunicación".