PAMPLONA 10 Feb. (EUROPA PRESS) -
El director de la fábrica de ZF-TRW en Landaben, Paul Henry Parnham, ha asegurado que el grupo "no quiere cerrar la planta" de Landaben, pero ha remarcado que los despidos son "necesarios" para "salvaguardar la planta". "Es una decisión dura, pero no nos queda otra", ha asegurado.
Así lo ha señalado el Plan Manager de ZF-TRW en una comisión en el Parlamento foral, pedida por todos los grupos parlamentarios, tras la solicitud realizada por el propio Parnham, para informar sobre el conflicto laboral de la fábrica de Landaben ante los 250 despidos planteados por la dirección.
Coincidiendo con la comparecencia del responsable de la planta, la plantilla se ha concentrado a las puertas de la Cámara, tras la pancarta 'Gobierno: de las palabras a los hechos. ZF-TRW solución', para mostrar su rechazo al ERE.
En su intervención, Parnham ha reiterado en distintas ocasiones que "no hay un plan de cierre" para la planta de Landaben y que la empresa "no quiere cerrar la planta", algo para lo que, según ha dicho, "necesitamos que nos ayuden los trabajadores, que estén dispuestos a cambiar". "Y eso no es una amenaza", ha subrayado.
De este modo, ha incidido en la idea de que "para salvaguardar la planta se necesitan de estas decisiones en un sector tan competitivo como el de la automoción" y ha advertido de que si la fábrica de Landaben "sigue como está, cerrará". "No es una amenaza, es la realidad", ha remarcado.
En este sentido, Parnham ha afirmado que la planta de Pamplona "se ha ido quedando aislada del resto del sector, se ha quedado anticuada" y ha destacado, además, que es la fábrica "con el coste más alto por hora" de todo el grupo, de 37,21 euros.
"Tenemos más de 50 días inhábiles al año, el dato más alto del grupo; también tenemos el número de horas de trabajo más bajo del grupo, 1.695, y la tasa de absentismo más alta, del 8 por ciento". "No es algo que diga contento y orgulloso, pero hay que decirlo, son cuestiones que hay que resolver", ha asegurado.