Actualizado 12/04/2011 12:40

Fiat eleva del 25% al 30% su participación en Chrysler

Sergio Marchionne Y Mike Manley
FIAT

TURIN (ITALIA), 12 (EUROPA PRESS)

El grupo automovilístico italiano Fiat ha elevado su participación en su socio estadounidense Chrysler desde el 25% hasta el 30%, mediante la suma de un 5% adicional, en virtud de lo estipulado en el acuerdo de asociación entre las dos multinacionales, con el visto bueno del Gobierno estadounidense.

Tras el cambio accionarial, el capital de Chrysler queda repartido en un 59,2% para el fondo de pensiones del sindicato United Auto Workers (UAW), un 30% para Fiat, un 8,6% para el Tesoro estadounidense y un 2,2% para el Gobierno canadiense.

Fiat aumentó del 20% al 25% su participación en Chrysler el pasado mes de enero, justo después de que la compañía italiana anunciara sus planes para producir un nuevo motor en Estados Unidos.

La empresa contaba con un derecho para elevar en un 15% la participación del 20% que tomó inicialmente en Chrysler, elevándola hasta el 35%, ejecutando tres tomas de un 5% cada una, pero condicionadas a la implementación de determinados compromisos en materia industrial.

De esta forma, la multinacional italiana recibió un 5% adicional en enero, cuando Chrysler se comprometió a fabricar la familia de motores de Fiat FIRE en Estados Unidos.

Ahora suma otro 5%, ya que Chrysler genera ingresos de más de 1.500 millones de dólares fuera de Norteamérica y ha alcanzado determinados acuerdos de distribución en Sudamérica.

Por último, Fiat recibirá el último tramo del 5% cuando Chrysler reciba 'luz verde' de las autoridades correspondientes para fabricar un coche de bajo consumo y reducidas emisiones, basado en una plataforma tecnológica de la corporación italiana.

Por cada uno de estos compromisos que no se hayan cumplido en enero de 2013, Fiat podrá hacerse participaciones del 5%, pero tendrá que pagar dinero por ello.

Además, Fiat cuenta con una segunda opción para comprar hasta un 16% de Chrysler, sin poder superar en total el 49%, hasta que la compañía estadounidense devuelva los créditos recibidos de Estados Unidos y Canadá.