Durante el pasado año, el SEIS efectuó 3.600 servicios, lo que representa un 13% menos que en 2013
MURCIA, 9 Mar. (EUROPA PRESS) -
El cabo del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS) del Ayuntamiento de Murcia, José Luis Montoya, y los bomberos Miguel Maldonado, Diego Salmerón, Jesús Soriano, José Viudes y Alfonso Martínez, han recibido la Insignia de Oro del Cuerpo por su reciente jubilación.
El alcalde de Murcia, Miguel Cámara, les ha impuesto la Insignia tras asistir a una Misa en la Catedral y presidir un acto institucional en el Ayuntamiento para conmemorar la festividad del San Juan de Dios, patrón de los trabajadores del Servicio de Extinción de Incendios del Consistorio.
Durante su intervención, Cámara ha ensalzado el Cuerpo de Bomberos como una "gran familia", algo que puede corroborar el cabo Montoya, quien ha mostrado su satisfacción por la distinción, tras 37 años de servicio, que se vieron interrumpidos en enero de 2014, cuando sufrió una lesión medular como consecuencia de un accidente doméstico.
Precisamente, Montoya ha agradecido el apoyo recibido del Cuerpo de Bomberos, tanto como el de su familia y sus amigos. Sus compañeros, explica, han estado con él, yendo desde el primer momento al Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo donde fue ingresado. Y es que ser bombero "es algo más que un trabajo, una mezcla de vocación que te hace sentirte ligado al Cuerpo toda la vida", ha remarcado.
Ahora, reconoce que ve la vida de otra manera y, aunque sigue en contacto con el parque de bomberos, se está dedicando a la recuperación, a entrenarse y a navegar a vela, un deporte en el que tiene previsto participar en el Campeonato de España en la modalidad de personas con discapacidad.
El cabo, que se muestra esperanzado en lograr buenos tiempos y representar a Murcia, indica que ha logrado sobreponerse a base de mucho esfuerzo y superación. Tras seis meses ingresado, Montoya se propuso cambiar las cosas y, ahora, reconoce que ni siquiera los médicos se explican cómo tiene esa "manera de vivir".
De forma anecdótica, recuerda que en Toledo conoció a una chica que fue a pasar revisión en el Hospital y que, precisamente, él había rescatado ocho años antes tras sufrir un accidente de tráfico.
ACTIVIDAD DEL CUERPO EN 2013
Cabe recordar que, a lo largo del pasado año, el SEIS realizó 3.623 servicios, de los cuales 1.568 fueron incendios, 481 salvamentos, 446 asistencias técnicas como achiques de agua, neutralización de vertidos, ruinas y hundimientos, apuntalamientos y caídas de ramas, y se atendieron 1.128 inspecciones, como revisiones, informes y prevención.
Las intervenciones realizadas en 2014 supusieron un descenso del 13 por ciento respecto al año anterior, cuando se registraron 4.162 actuaciones. Esta reducción se constató en todos los tipos de servicios. En el caso de los incendios, los bomberos fueron requeridos para 347 sucesos menos (1.568 en 2014 frente a 1.915 en 2013, una reducción del 18 por ciento).
En la actualidad, trabajan en el Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento 200 personas, de ellos, hay 1 jefe de servicio, 2 oficiales, 5 suboficiales, 11 sargentos, 27 cabos, 101 bomberos, 40 conductores, 9 operadores, 1 técnico deportivo, 1 jefe de negociado de administración y 2 auxiliares administrativos. Este año está previsto incrementar la plantilla con la convocatoria de 36 plazas de empleo público.
En cuanto a los medios materiales, el servicio dispone de una flota de 35 vehículos y 11 remolques. Entre ellos, 9 son autobombas urbanas, 3 autobombas rurales, 4 autoescaleras, 2 brazos, 2 polisocorros, 4 cisternas y 11 vehículos ligeros.
ACTUACIONES MÁS RELEVANTES
Respecto a las actuaciones más relevantes realizadas en 2014, destacan un incendio en un tercer piso de la calle Trinidad de Murcia, declarado el 12 de enero, y en el que los bomberos tuvieron que proteger la fachada exterior con una escala para evitar el avance vertical del fuego. Por el interior, se procedió a abrir la vivienda inmediata superior a la siniestrada, en la que residía un hombre de 83, que fue despertado.
El 21 de enero 2014, los bomberos atendieron un accidente de automóvil en Torreagüera. En concreto, un turismo había caído en la acequia Cabeza del Reguerón Viejo, quedando volcado sobre el techo, con las ruedas hacia arriba, encajonado en el cauce que llevaba una corriente de agua de unos 10 centímetros, por lo que decidieron elevar mecánicamente el vehículo para liberar las puertas.
Simultáneamente, dos agentes del SEIS se introdujeron en el habitáculo colocando a la persona atrapada un collarín cervical. Finalizada la maniobra de elevación del vehículo, abrieron una de las puertas y extrajeron al ocupante con la tabla de rescate.
Otro de los sucesos más destacados tuvo lugar el 27 de enero, cuando procedieron al rescate de una persona atrapada bajo un motocultor. El agente al mando del servicio, tras valorar la situación, decidió desmontar el eje tractor, posibilitando con esa maniobra la liberación del herido, facilitando a los sanitarios su actuación.
En total coordinación con el equipo sanitario, los bomberos movieron al herido evitando riesgos mayores, pues una de las cuchillas había quedado introducida en su pierna, con peligro de seccionamiento arterial.
El 29 de enero, los bomberos pudieron contener una fuga de gas en una zanja abierta por obras. Tras crear un cordón de seguridad en un radio de unos 50 metros, los bomberos comprobaron con el detector de gases que había riesgo de inflamación a unos dos metros del escape. Para taponar la grieta en la conducción de gas, de unos cinco centímetros, utilizaron un cono de madera rodeado de varias vueltas de cinta tapafugas, metido a presión contra la grieta con la ayuda de un mazo de goma.
Asimismo, el 6 de agosto atendieron un incendio en una industria química en el Cabezo Cortao. Durante la extinción, tuvieron que adoptar medidas especiales por la posible explosión de elementos químicos contenidos en aerosoles y bombonas. Los efectivos accedieron a la zona del laboratorio, origen del incendio, que lograron sofocar.
Por otra parte, el 22 y 23 de septiembre, recibieron 94 avisos a causa de las lluvias torrenciales que provocaron el desbordamiento de las ramblas, tanto de personas afectadas como de Policía Local, Policía Nacional o Guardia Civil, por inundaciones de calles, viviendas y garajes, caídas de tapias, techados y árboles y por turismos atrapados en lugares a los que no se puede acceder a causa de las corrientes.
El servicio debió llamar a personal de refuerzo, formando equipos auxiliares para atender una situación. Entre los servicios, destaca el rescate de los ocupantes de un turismo inmovilizado en la carretera de la Alcayna, y poco después el de otros dos en la misma carretera, montando una línea de vida para rescatar de uno de los vehículos a su ocupante y del otro a una familia compuesta por el padre, la madre y una niña de corta edad.
El 16 de octubre, el SEIS rescató a una persona herida del asiento trasero del vehículo en el viajaba, tras colisionar este con otro en un carril de Aljucer. La viajera se encontraba consciente y ya había sido atendida por personal sanitario allí presente, procediendo los bomberos a su extracción utilizando la tabla de rescate.
Por último, el 31 de diciembre, un camión que transportaba restos de gasoil y gasolina, descargado y sin desgasificar, se salió de la vía circulando en dirección Albacete-Cartagena, a la altura de las pedanías de Valladolises y Lo Jurado, invadiendo el carril contrario. El SEIS montó una línea de prevención de espuma y contuvo un pequeño derrame existente, causado por una fisura en el depósito de combustible.