Las algas de posidonia pueden suministrarse como alimento para estos animales sin requerir tratamiento de residuo
MURCIA, 30 Mar. (EUROPA PRESS) -
Un estudio en el que participan investigadores de la Universidad de Murcia (UMU) pretende introducir la Posidonia oceánica en la cadena alimentaria de los rumiantes en sustitución de la paja, lo que podría suponer un ahorro económico importante, según fuentes del departamento de Promoción de la Investigación de la UMU (Prinum), dependientes del Vicerrectorado de Investigación.
Las algas de posidonia pueden suministrarse como alimento para estos animales sin requerir tratamiento de residuo, es decir, solo lavándolas con agua y dejándolas secar están perfectamente preparadas para suministrarlas a los rumiantes.
De ser positivos los resultados, se podrá conseguir un ahorro económico muy importante tanto para los ganaderos como para organismos e instituciones, según añaden las mismas fuentes.
El ahorro para el ganadero va a ser considerable, "ya que la Posidonia es un producto que no requiere ninguna manipulación y los costes van a ser muy pequeños", según apunta Juan Sotillo, uno de los investigadores de la Universidad de Murcia que trabaja en el proyecto, que destaca que el kilo de paja, actual alimento de estos rumientes, cuesta alrededor de diez céntimos de euro.
La posidonia actúa como barrera natural durante todo el año y sus resultados contra la regresión de las playas mediterráneas es excelente. Actualmente se retira sólo en épocas de baño. Para el Ayuntamiento de San Javier y de Cartagena, que aportan parte de la posidonia a este proyecto, el empleo de estas plantas supondrá una enorme ventaja, ya que se reducirán o eliminarán los costes económicos de la retirada puntual en época de baño.
Por otro lado, los beneficios para los Ayuntamientos serán también importantes ya que la Posidonia "afea las playas" y es "molesta para los bañistas", destaca Sotillo, con lo cual el turismo también se vería favorecido y la imagen de las Instituciones también.
Este estudio nace de un convenio de colaboración entre la Universidad de Murcia, los Ayuntamientos de San Javier y de Cartagena en Murcia, la Universidad de Santiago de Compostela y la Estación Agrícola Experimental de León (CSIC).
De momento, a falta de la investigación de laboratorio final, ya hay cabras de raza Murciano-granadina que comen posidonia oceánica desde hace dos meses sin que se haya percibido ninguna alteración sanitaria reseñable en los animales, según explica Cándido Gutiérrez, otro de los miembros del equipo investigador de la Universidad de Murcia, donde se desarrolla la actual fase del proyecto.
En la Estación Agrícola Experimental de León repetirán el estudio con ovejas, y en la Universidad de Santiago con vacas. Los investigadores, que previamente analizaron las virtudes de la posidonia como alimento viable para rumiantes, calculan que las últimas conclusiones del estudio estarán listas en 2 años y se muestran optimistas con los resultados.