MADRID 17 Oct. (EUROPA PRESS) -
El partido Izquierda Anticapitalista ha presentado este lunes en Madrid 6.800 avales por Madrid para poder concurrir a las próximas elecciones generales del 20N. Además, la formación se va a presentar en 17 provincias donde, según ha asegurado el cabeza de lista por Madrid, Miguel Urbán, han conseguido las firmas necesarias durante los veinte días de recogida.
La reforma de la Ley Electoral pactada por PSOE, PP, CiU y PNV el pasado mes de enero decretó que los partidos que no hubieran obtenido representación en ninguna de las Cámaras en la anterior convocatoria de elecciones necesitarán para poder presentarse la firma, al menos, del 0,1 por ciento de los electores inscritos en el censo electoral de la circunscripción por la que pretendan su elección.
Este lunes era la fecha tope para que las nuevas formaciones presentaran los avales y las candidaturas correspondientes. Izquierda Anticapitalista ha conseguido 2.146 avales más de los requeridos ya que para presentarse en Madrid se necesitaban 4.654.
No obstante, la formación ha denunciado la nueva reforma de la Ley Electoral ya que, a su juicio, es cada vez "más injusta" y "antidemocrática" e impide a las nuevas organizaciones políticas estar en "igualdad de oportunidades" que el resto de partidos.
"No es lo mismo votar a un partido que a otro, ni votar en una provincia que en otra. La ley ya era suficientemente antidemocrática como para encima incluirle la obligación de tener que recoger avales", ha comentado Urbano a la entrada a la jefatura provincial de Madrid donde han presentado los avales.
Por su parte, la 'número dos' del partido por Madrid, Andrea Raboso, ha reconocido que están "muy contentos" y que gracias a la presencia que han tenido en la calle han podido hablar "con mucha gente" del proyecto político y de la necesidad de reformar la Ley Electoral.
"Traemos más avales de los que nos pedían y gracias a ello podemos presentarnos a las elecciones y pasar las trabas que nos han puesta con esta ley que cada vez es más injusta y antidemocrática", ha zanjado