MADRID, 27 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Mesa del Congreso ha dado vía libre a autorizar un gasto de 82.600 euros para el retrato de José Bono, su último presidente, un precio que, siendo similar al de cuadros anteriores, triplica el coste del dedicado a su antecesor, el también socialista Manuel Marín, que optó por una fotografía cuyo precio será de 24.780 euros.
El cuadro de Bono será obra del pintor hiperrrealista madrileño Bernardo Torrens, que ya tiene colgado en las paredes del palacio del Congreso el retrato de Félix Pons, mientras que el de Marín será una fotografía de Cristina García Rodero, Premio Nacional de Fotografía en 1996 y primera española que ingresó en la Agencia Magnum.
Según se informó a Europa Press en fuentes parlamentarias, el órgano de gobierno de la Cámara Baja ha aprobado las cifras de los dos retratos: Por el cuadro de Bono se pagarán 70.000 euros más 12.600 de IVA, mientras que por la fotografía de Marín se abonarán 21.000 euros más 3.780 euros de IVA.
BONO CRITICÓ LA FOTO
En su día Bono cuestionó que su antecesor optase por una fotografía para la Galería de Retratos de Presidentes del Congreso, que ocupa la primera planta del Palacio de la Carrera de San Jerónimo.
Fue el actual presidente de la Cámara, Jesús Posada, del PP, quien decidió en febrero dar vía libre a la fotografía, argumentando precisamente que su precio es inferior a lo que podría costar un retrato al uso de un pintor de cierto renombre.