"Lo que se busca es que sufran el estrés y desarrollen el espíritu de equipo", explica un comandante
SAN GREGORIO (ZARAGOZA), 20 (EUROPA PRESS)
Los militares de la Brigada de Infantería Ligera Aerotransportable (BRILAT) Galicia VII que se desplegarán próximamente en Afganistán están ultimando estos días su preparación en el campo de maniobras de San Gregorio, en Zaragoza, donde se están adiestrando "con el mayor realismo posible" para "todos los tipos de operaciones" que van a tener que llevar a cabo durante seis meses en el país asiático.
Así lo explica el jefe de la XXXII Fuerza Española en Afganistán (ASPFOR), el coronel Fernando González García-Valerio, que está siguiendo de cerca el ejercicio de integración que lleva a cabo desde el pasado 15 de septiembre unos 1.300 militares, de los que unos 1.000 formarán el próximo contingente que comenzará a desplegarse en Afganistán a finales de octubre y principios de noviembre para sustituir a la Brigada Paracaidista.
"Aquí nos preparamos para lo peor", resume el capitán Daniel Díaz Cuyar, que este jueves está al mando del puesto avanzado de combate 'Robles', que simula en San Gregorio una de las dos bases de estas características que tiene España en la provincia de Badghis y de las que se replegarán las tropas españolas en los próximos meses.
Precisamente, el repliegue previsto por el Gobierno, de acuerdo a los planes de la OTAN, y que comenzará con una reducción del personal que viajará ahora a zona, ocupa un papel importante en el planeamiento del despliegue de la BRILAT.
Los planes previstos contemplan que los efectivos de esta Brigada, con unidades en Pontevedra, Asturias y Valladolid, protagonicen el primer repliegue desde el terreno, cuando se dejen los dos puestos avanzados de combate. Desde Ludina y Moqur tendrán que ir hasta Qala-i-Naw, donde está el grueso del contingente español, en la base 'Ruy González de Clavijo'.
Aunque se es consciente de que estos repliegues implican un mayor movimiento de vehículos y personas, la Plana Mayor de la ASPFOR XXXII considera que cuenta con "fuerza suficiente" para el "refuerzo" en la seguridad que necesitará en el repliegue.
TIENEN "EXPERIENCIA Y LOS MEJORES MEDIOS"
Esta seguridad viene dada en parte por los medios con que cuentan las tropas españolas, que, según ha apuntado el jefe de la BRILAT, el general José Antonio Alonso, son "los mejores que hay en el mercado", pero también por la "experiencia" con que cuentan los militares de la BRILAT. "La gente va muy bien preparada", insiste el general
Tras meses de preparación, el ejercicio que finalizará el próximo domingo, cuando el general Alonso certifique que este "último hito" de la instrucción ha terminado con éxito, pone a prueba la integración de todo el personal que formará parte del próximo contingente español.
En estas maniobras lo que se busca es la "cohesión" del contingente mientras se adiestran "de la forma más realista". Así, además de vivir durante algo más de diez días de manera similar a la que lo harán durante seis meses en Afganistán, se ponen a prueba en operaciones como las que deberán desarrollar allí a diario. "El objetivo es que se enfrenten a situaciones lo más parecido posible a la realidad", explica el jefe de la Plana Mayor, el teniente coronel José Manuel Judez.
Este jueves, dos compañías del Batallón de Maniobra simulan, de manera separada un incidente durante una patrulla: un artefacto explosivo estalla al paso de un convoy militar y el ataque es aprovechado por insurgentes, que disparan desde lomas cercanas. Según explica el jefe de operaciones del Batallón, el comandante David Cuesta, el ejercicio se "exagera" para llevar la instrucción al límite.
En el ejercicio, con fuego real, se simula la evacuación de un herido grave, lo que implica crear una burbuja de seguridad y garantizar que el helicóptero solicitado para el traslado de este militar puede tomar tierra. Todo ello requiere el trabajo concienzudo de los zapadores, que garantizan que la ruta está limpia con sus equipos de desactivación.
"Necesitamos que todo el mundo pase por estas acciones de combate. Lo que se busca es que sufran el estrés y desarrollen el espíritu de equipo, que es clave para cuando estemos allí", explica el comandante Cuesta.
Además del Batallón de Maniobra, formado en base al Batallón de Infantería de toledo del Regimiento de Infantería 'Príncipe 3', participan otras unidades de la BRILAT: la de Apoyo a la Base, la Unidad de Protección y Seguridad, la Unidad de Ingenieros, la Unidad de Transmisiones y los Equipos de Asesoramiento al Ejército afgano.
El contingente se completa con la Unidad de Apoyo Logístico 61 de Valladolid, la Unidad de Operaciones Psicológicas del Regimiento de Inteligencia número 1 de Valencia, la Unidad de Cooperación Cívico-Militar y equipos de control aéreo y táctico del Ejército del Aire y la Armada.