Alonso defiende el legado de Zapatero y su "liderazgo" en el PSOE

Despedida De José Luis Rodríguez Zapatero
EUROPA PRESS
Actualizado: miércoles, 29 junio 2011 14:49

MADRID, 29 Jun. (EUROPA PRESS) -

El portavoz parlamentario socialista, José Antonio Alonso, ha defendido en el Debate del estado de la Nación el legado de los Gobiernos de José Luis Rodríguez Zapatero y le ha dedicado a éste unas palabras de despedida en su último Debate, proclamando que el PSOE está "orgulloso de su liderazgo" y calificándole de "excelente gobernante, progresista y responsable".

"Estamos orgullosos de su liderazgo todos estos años y seguiremos estándolo hasta el final", ha manifestado Alonso, destacando de Zapatero su carácter "demócrata", porque "ha gobernado escuchando", y elogiando su trayectoria como gobernante.

"Ha sabido gobernar cuando las cosas iban bien, propiciando un salto cualitativo en derechos y en modernidad y ha tenido el coraje de hacer lo correcto cuando las cosas se han puesto mal. Se ha volcado contra la crisis y ha antepuesto siempre los intereses generales a cualquier otra consideración, con las ideas claras y los objetivos precisos", ha recalcado.

Según Alonso, la "idea más clara" de Zapatero que quedará para la historia es la defensa del "bienestar y el futuro de todos los españoles". El portavoz socialista ha finalizado así un discurso que también ha sonado a despedida por sus agradecimientos y felicitaciones a varios ministros.

A la vicepresidenta económica, Elena Salgado, le ha felicitado por su trabajo en la reducción del déficit; al vicepresidente primero y ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, por los éxitos en la lucha contra ETA y en favor de la seguridad; a la de Sanidad, Leire Pajín, por su combate contra el tabaquismo; a la de Ciencia, Cristina Garmendia, por la Ley de la Ciencia y a la de Exteriores, Trinidad Jiménez, por su trabajo "ingente" en las áreas prioritarias para España.

Ha destacado también la "solvencia" de la ministra de Defensa, Carme Chacón, ha agradecido el trabajo "ingente" en pro de la modernización de la justicia y ha elogiado la resolución de la crisis de los controladores aéreos. El portavoz socialista, igual que todos los demás, empezó su discurso con un recuerdo a los militares víctimas de atentado en Afganistán, así como al español muerto en un ataque contra un hotel de Kabul.

SENSACIÓN DE DESPEDIDA

Finalizado el Pleno del Congreso, Alonso precisó a los periodistas que "es inevitable que haya una cierta sensación de despedida" porque éste es el último Debate del estado de la Nación de Rodríguez Zapatero, pero quiso dejar claro que el presidente "va a seguir siéndolo hasta el último momento de su mandato".

"Va a seguir siendo presidente del Gobierno y, por cierto, secretario general del PSOE --señaló--. Y tenemos otro candidato (Alfredo Pérez Rubalcaba) que hará, y espero que como presidente del Gobierno, el Debate sobre el estado de la nación del próximo año. En esa medida, quien quiera ver una despedida, pues vale".

Alonso ha defendido todas las reformas de Zapatero, convencido de que ya están sirviendo para reducir desequilibrios "progresivamente" y de que tendrán "resultados positivos" y redundarán en creación de empleo "más tarde o más temprano", que es el principal objetivo del Gobierno.

Ello le ha servido para afear al PP y a su presidente, Mariano Rajoy, que no haya "colaborado nunca" y "siempre" haya intentado "boicotearlas" y ha avisado de que esa actitud le pasará factura en las próximas elecciones porque lo españoles se dan cuenta de que "lo único que les interesa es el poder y los intereses generales les importan un bledo".

Según Alonso, el PP "jugó a hacer caer el Gobierno", aunque fuera a coste de "hacer caer el país, incluso la zona euro" cuando no apoyó los recortes de mayo de 2010 y en todas las reformas posteriores y de esa manera ha traspasado "las líneas rojas elementales". "Entiendo que digan 'al Gobierno ni agua', pero que no le den ni agua al país eso no lo entiende nadie", ha remachado.

EL AÑO QUE VIENE HABRÁ UN PRESIDENTE SOCIALISTA

Por eso, se ha mostrado convencido de que los ciudadanos distinguirán entre un PP que sólo pide elecciones y un Gobierno que se está "dejando la piel", de manera que "dentro de un año" en el Debate estará un "presidente del Gobierno también socialista".

Pero además, el portavoz socialista ha cargado contra la "herencia envenenada" que, a su juicio, dejó el PP en el año 2004, una "triste herencia" de "ladrillazo", abandono de la educación de jóvenes que iban a trabajar a al construcción, "endeudamiento a galope" de familias y empresas, baja productividad y elevada deuda.

Los 'populares', ha concluido, no pueden dar "lecciones de gestión", mientras los socialistas sí que pueden "restregar a estos señores de la derecha" su balance y su patrimonio en políticas sociales, y ha enumerado medidas como el aumento del Fondo de Reserva de la Seguridad Social, el permiso de paternidad y el aumento del de maternidad, el de lactancia, la renta básica de emancipación, las pensiones a parejas de hecho, el aumento de las becas o la prestación por desempleo para los autónomos. "Todo eso lo hemos hecho nosotros, no ellos que nunca hicieron nada al respecto", ha manifestado.

EL PP ES "ANTISOCIAL" Y RECORTARÍA PRESTACIONES

De este modo, ha defendido que aunque el PP quiera "desesperadamente" aparecer como un partido social, "los hechos cantan" y, dado que Rajoy no ha aprovechado el Debate para hablar de ninguno de sus proyectos, ha concluido que si el PP ganase las elecciones "llevaría a cabo el mayor recorte de prestaciones sociales de la historia de la democracia y privatizarían los servicios públicos". "Son el partido más antisocial de toda la derecha europea y nosotros lo vamos a decir", ha rematado.

Al final, en declaraciones a los periodistas, Alonso ha expresado su convicción de que este Debate sobre el estado de la Nación ha sido ganado "claramente" por el presidente del Gobierno porque "ha tenido contenido" mientras que "la intervención de Rajoy ha estado completamente ayuna de cualquier planteamiento político". "Se ha limitado a pedir elecciones y eso es algo intolerable para una persona que, según él, quiere gobernar el país", ha concluido.