Más del 97% de los ciudadanos están en contra de los recortes en Sanidad, Educación y Seguridad Social, según AEVAL

La mayoría cree que los recursos destinados actualmente a estas tres partidas son "muy pocos"

MADRID, 21 Sep. (EUROPA PRESS) -

Más del 97 por ciento de los ciudadanos está en contra de aplicar recortes en Sanidad, Educación o Seguridad Social, mientras que alrededor de la mitad vería con buenos ojos un reducción del gasto en materia de Defensa y Obras Públicas, según los datos derivados del último informe realizado por la Agencia Estatal de Evaluación de las Políticas Públicas y la Calidad de los Servicios (AEVAL), dependiente del Ministerio de Política Territorial y Administración Pública.

Tal y como pone de manifiesto este estudio, que analiza la opinión ciudadana acerca de los servicios y el gasto público de las distintas administraciones, así como la confianza en empleados públicos, la "inmensa mayoría" de los ciudadanos se oponen a una reducción en las partidas destinadas a estos servicios que, según la presidenta de la entidad, María Luisa Carcedo, constituyen "el núcleo duro del Estado de Bienestar".

Además, según este informe, que recoge las conclusiones de una encuesta realizada en 2010 a 2.489 ciudadanos y de otros sondeos elaborados tanto por la AEVAL como por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) y que lleva por título 'La Administración Pública a juicio de los ciudadanos', una mayoría de la población, es decir, más del 50 por ciento, considera que los recursos destinados a Sanidad, Educación y Protección al Desempleo son "muy pocos".

Por el contrario, más del 50 y del 40 por ciento de los encuestados se han mostrado partidarios de aplicar recortes Defensa y en Obras Públicas, respectivamente, porcentajes que han aumentado desde 2008. Asimismo, la mayoría de ciudadanos piensa que los recursos públicos que se destinan a estas dos partidas "son demasiados".

EDUCACIÓN, ENSEÑANZA Y TRANSPORTE, BIEN VALORADOS

Los servicios mejor valorados por los ciudadanos tal y como demuestra este informe son el transporte público, la enseñanza y la sanidad pública. En concreto, entre un 60 y un 70 por ciento de la población está "muy" o "bastante" satisfecha con estos tres servicios, estando en el extremo opuesto la Administración de la Justicia y la gestión del desempleo.

Según Carcedo, esta última valoración se debería a la "mayor masificación" de los servicios de desempleo debido al aumento en el número de parados. En cuanto a la Justicia, la presidenta de la AEVAL ha querido matizar que la valoración de los ciudadanos sobre este servicio mejora cuando se convierten en usuarios.

En general, más de la mitad de los ciudadanos se declara "muy satisfecho" con el funcionamiento de los servicios públicos, y tres de cada cuatro ha destacado el buen trato recibido en su última visita a una oficina de la administración y la profesionalidad de los empleados públicos, si bien según este informe, cada vez son más los ciudadanos que optan por utilizar la administración electrónica para realizar sus gestiones.

Actualmente, según estos datos, un tercio de los ciudadanos son usuarios directos de la e-administración, de los cuales, el 80 por ciento se declara muy o bastante satisfecho con el funcionamiento de este servicio, porcentaje mayor al que presentan los usuarios que tienen un contacto presencial o por teléfono.

POCA CONFIANZA EN LOS JUECES

En cuanto a la valoración de los trabajadores públicos, los que más confianza reciben por parte de los ciudadanos son bomberos, médicos y profesores, siendo los jueces y los inspectores de Hacienda los que presentan los niveles más reducidos de confianza.

Según el estudio, el tercero de estas características realizado por la AEVAL, mientras que entre el 95 y el 80 por ciento de la población confía "mucho" o "bastante" en los bomberos, los médicos y los profesores, y la confianza de los funcionarios "en general" ronda el 50 por ciento, la de los diplomáticos, jueces e inspectores de Hacienda no llega al 40 por ciento, si bien es verdad, tal y como señala el estudio, que se trata de las profesiones con menos contacto cotidiano.