MADRID 6 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Bloque Nacionalista Galego (BNG) defenderá el próximo martes en el Pleno del Congreso, durante el debate de la proposición de ley del Parlamento catalán solicitando la delegación a la Generalitat de la competencia para convocar el referéndum anunciado para el 9 de noviembre, que Cataluña no está planteando un "órdago" ni un "juego de cromos", sino simplemente pidiendo autorización para celebrar una consulta "civilizada, legal y democrática".
Sobre esta premisa construirá su discurso la portavoz de los nacionalistas gallegos en el Congreso, Olaia Fernández Davila, quien ha avanzado a Europa Press que su voto será favorable a la propuesta del Parlament porque el BNG siempre ha defendido el derecho de audeterminación, y mantendría la misma posición si el "pueblo gallego demandase también poder decidir su futuro en un referéndum".
"Somos absolutamente partidarios de que la demanda del pueblo catalán se haga efectiva y se pueda pronunciar en un referéndum", enfatiza la diputada del BNG convencida, además, de que existe "amparo legal" para convocar la consulta.
También dejará claro su rechazo a la "posición cerrada e inflexible" que, a su juicio, viene mostrando el Gobierno ante la petición de Cataluña. "El Ejecutivo no ha dado pasos en pro de un entendimiento o de un diálogo sincero", censura.
Además, advierte de que la consulta "no está planteada como un órdago ni un juego de cromos" y que lo que debería hacer el Gobierno de Mariano Rajoy es emular al Gobierno británico que sí ha avalado una consulta en Escocia. A su juicio, "un gobierno democrático que se precie tiene el deber de atender" lo que, ella considera "una demanda unánime", máxime si lo que se pide "es algo tan civilizado como pronunciarse en un referéndum".
AÚN HAY TIEMPO HASTA NOVIEMBRE
Pero Fernández Davila no oculta su pesimismo respecto a lo que puedan plantear los 'populares' y el mismo mal augurio tiene sobre la posición del primer partido de la oposición. "Sinceramente, del PSOE no esperamos nada", confiesa, lamentando su rechazado a la consulta y dando por hecho que, en este caso, "como en muchos otros", el "bipartidismo" sabrá "unirse" y pactar "acuerdos sin luz y taquígrafos".
Aún así, destaca que hasta el 9 de noviembre hay "tiempo por delante" para que el Gobierno y el PSOE "flexibilicen sus estáticas posturas que no conducen a nada". En este punto, subraya que si los grupos mayoritarios fueron capaces de reformar la Constitución "a demanda de la Troika" en apenas unos días deberían poder impulsar "las modificaciones legales que consideren para que el pueblo catalán ejerza su derecho a expresarse en las urnas".