Dice que cometen un delito del Código Penal y que habrá que actuar si es necesario para cumplir la ley
MADRID, 15 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Congreso de los Diputados, José Bono, ha confesado sentirse "absolutamente indignado" por la protesta que los simpatizantes del Movimiento 15M están protagonizando frente al Parlamento Catalán desde las 7.00 horas de este miércoles con el objetivo de impedir el acceso de los diputados catalanes, ya que, según Bono, supone "una falta de autoridad inaceptable", al tiempo que ha mostrado su "solidaridad" con el alcalde de Madrid, Alberto Ruíz Gallardón, por haber sido increpado por un grupo de manifestantes la noche del lunes.
En declaraciones a Punto Radio, recogidas por Europa Press, Bono asegurado que "la soberanía popular se encuentra en las Cámaras" y que, por lo tanto "no se puede impedir la entrada a los diputados". De esta forma, ha justificado la actuación de las Fuerzas de Seguridad del Estado si es necesario al estar cometiendo los 'indignados', a su parecer, "un delito que está en el Código Penal".
"La fuerza pública está para legítimamente forzar a quienes quieren cometer el delito porque está en el Código Penal contemplado el impedir la entrada a los diputados. Es absolutamente inaceptable. Estoy indignado", ha aseverado.
En este sentido, Bono ha reconocido que de haber tratado de entrar al Congreso los 'indignados' madrileños durante las sentadas que protagonizaron la semana pasada frente a la Cámara Baja, su posición hubiera sido la de permitir la carga policial para impedirlo. "¿Cómo van a entrar al hemiciclo? Ahí solamente se entra con el acta de diputado que otorgan los ciudadanos", ha señalado.
"El otro día me llamó el comisario a las tres de la mañana para decirme: que ya se van. Como si eso fuera una verbena o una romería. Yo le dije: si quieren entrar, carguen", ha reconocido al tiempo que ha subrayado que "una tienda de campaña, una vestimenta o unas ideas" no les dan derecho a los 'indignados' a tratar de entrar en la Cámara Baja.
Aunque no ha querido señalar al vicepresidente primero del Gobierno y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, ni a ninguna institución concreta como los responsables de frenar las protestas que considera ya "inaceptables", Bono ha afirmado que "sean unos o sean otros", habrá que actuar en caso de que sea necesario porque "por mucho que se quiera ser condescendiente el único imperio en un Estado de Derecho es el de la ley y no las emociones".
"Aquí la ley se cumple y luego ya veremos, porque si no se cumple ya está todo visto, y entonces no estamos en democracia", ha apuntado para añadir que aunque durante los primeros días del Movimiento 15M le dio la impresión de que los 'indignados' "eran buena gente", los acontecimientos que están teniendo lugar desde la pasada semana no le "inspira la confianza de los primeros días".
"El primer día que me preguntaron dije: estos chicos parecen buena gente. Pero a estos de ahora, desde luego yo no les invito ni a mi casa", ha reconocido.
SOLIDARIDAD CON GALLARDÓN
Asimismo, Bono ha querido mostrar su "solidaridad" con el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, por los insultos de los que fue objeto la pasada noche del lunes a las puertas de su casa y ha asegurado que tiene previsto llamarle para trasladarle en persona su "indignación".
"Me parece absolutamente indignante que se le ofenda delante de sus hijos o de su mujer", ha aseverado al tiempo que ha valorado positivamente que concejales madrileños de otras formaciones políticas, como ha sido del portavoz de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Madrid, Ángel Pérez, hayan criticado este tipo de sucesos. "Alabo a quien defiende la legalidad así", ha añadido.