MADRID 22 May. (EUROPA PRESS) -
Un equipo de expertos en trata de seres humanos de la Policía Nacional ha partido este jueves hacia Nigeria para formar parte del grupo de expertos internacionales que colaborará en la búsqueda de las más de 200 niñas nigerianas secuestradas en Chibok por el grupo terrorista Boko Haram.
Según ha informado la Policía en un comunicado, los agentes, adscritos a la Brigada Central contra la Trata de Seres Humanos de la UCRIF Central de la Comisaría General de Extranjería y Fronteras, tendrán su base en la Embajada de España en Abuja y compartirán trabajo, de momento, con expertos de Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Israel, China y otros países.
El director general de la Policía, Ignacio Cosidó, se reunió ayer con los agentes que se van desplazar a la zona para analizar el alcance de la misión y darles las últimas directrices. Los cinco policías viajan a Nigeria después de que el Gobierno de este país aceptara el ofrecimiento español.
Cosidó les trasladó "la importancia de su cometido para España y para la Policía Nacional", porque España se sitúa "entre los países que más capacidades han puesto a disposición para resolver un caso que ha conmocionado a toda la comunidad internacional".
La prioridad del equipo español se centrará en apoyar operativamente al contingente internacional desplazado a la zona para localizar a las niñas nigerianas, prestando asistencia técnica y humanitaria necesaria en cada momento y aportando la información y datos que vayan obteniendo a los investigadores de la UCRIF Central para que sean analizados y tratado desde Madrid. Su objetivo es poder diagnosticar posibles rutas, trayectos y cruces irregulares de fronteras de las niñas.
Los investigadores alertarán a las autoridades de los países que, fuera de los cauces legales, pudieran ser los receptores de estas víctimas para su tráfico y explotación sexual. Éstas, a su vez, deberán avisar a los responsables de los puestos fronterizos, inicialmente del entorno Schengen y a los de tránsito hacia aquellos, donde la explotación de menores se encuentre menos perseguida.
Uno de los objetivos principales es evitar la venta de las menores, por parte del grupo terrorista Boko Haram, para ser explotadas tanto laboralmente como sexualmente o ser obligadas a contraer matrimonios serviles, sometidas a trabajos inhumanos y en condiciones deplorables que harían peligrar su integridad física y moral.