La revisión global de la LOREG firmada por PSOE, PP y los nacionalistas sigue su curso y se aprobará en Pleno el martes
MADRID, 16 Dic. (EUROPA PRESS) -
El PSOE, el PP y los nacionalistas catalanes y vascos unieron sus votos para rechazar en el Pleno del Congreso las reformas electorales propuestas por IU, UPyD y Coalición canaria como alternativa a la revisión global de la Ley Electoral que han firmado los cuatro grandes grupos de la Cámara.
El diputado de Izquierda Unida (IU), Gaspar Llamazares, cargó contra el sistema electoral vigente, que considera una "gota malaya" que penaliza a las terceras fuerzas y que ha provocado una polarización de la vida política e institucional del país. Según sus cálculos, las fuerzas mayoritarias se repartieron en 2008 diez escaños que debieran haber recaído en IU.
Frente a ello, defendió un sistema alternativo basado en tres medidas: la rebaja de dos a uno el mínimo de escaños por provincia, la creación de un fondo de restos para acumular los votos que no han llegado a aportar diputados, y la sustitución de la regla D'Hont por la fórmula Hague.
ROSA DÍEZ EXIGIRÁ LA REFORMA PARA PACTAR
Una reforma similar propuso Rosa Díez, la portavoz de Unión, Progreso y Democracia (UPyD), para quien la ley vigente de 1985 "pervierte" el sistema democrático, pero ni el PSOE ni el PP quieren cambiarlo porque les beneficia. Su apuesta pasa también por ampliar el número de diputados de 350 a 400 escaños.
En su opinión, corregir la proporcionalidad del sistema es "una reforma clave para la recuperación de principios constitucionales que no son negociables", por lo que reiteró que lo exigirá como condición previa ante PSOE y PP cuando haya que hablar de "quién y sobre todo cómo se gobierna".
El PSOE, por boca del diputado Elviro Aranda, rechazó ambas propuestas alegando que exigirían modificar la Constitución, que es la que determina que la circunscripción es la provincia, y porque además "el 97 por ciento de la Cámara" lo respalda. Según ha explicado, "la proporcionalidad no es un valor absoluto, sino que hay que ponderar con otros intereses electorales", como la representación de las provincias.
En similares términos se pronunció José Antonio Bermúdez de Castro, del PP, quien recordó que todos los partidos han tenido que "modular" sus planteamientos iniciales para llegar a ese denominador común que es la reforma suscrita por los mayoritarios y los nacionalistas.
Una proposición de ley que, según ha destacado el ponente de CiU, Jordi Xuclà, no es una reforma menor como la plantean IU y UPyD, sino que incluye medidas de calado como el voto en urna para los emigrantes, la prohibición de la precampaña o la desactivación del papel de los tránsfugas en las mociones de censura municipales.
EL VOTO EMIGRANTE
La propuesta de reforma de Coalición Canaria, presentada por el diputado José Luis Perestelo, no cuestiona la proporcionalidad del actual sistema, sino que se centra en combatir precisamente una de las medidas de esa proposición de ley de los cuatro grandes grupos: la anunciada exclusión de los emigrantes en los comicios locales. "Estamos ante una injusticia y, con esta enmienda de totalidad quiere expresar su rechazo a la exclusión de los emigrantes de las elecciones municipales", sentenció.
El representante del PNV, Aitor Esteban, le respondió que no tiene sentido que haya emigrantes que, sin conocer siquiera el municipio en el que está votando, determinan quién gobierno ese ayuntamiento.
Cada una de las tres enmiendas de totalidad con texto alternativo fue rechazada por el Pleno del Congreso sin más apoyos que el de las formaciones proponentes.
Así las cosas, lo que sigue su curso es la reforma de PSOE, PP, CiU y PNV, que este viernes se debate en la Comisión Constitucional y el próximo martes se eleva al Pleno del Congreso para su remisión al Senado con el fin de que se tramite en febrero para garantizar su aplicación en las elecciones autonómicas y municipales de mayo de 2011.