MADRID 11 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Congreso de los Diputados rindió esta tarde homenaje al ex guerrillero antifranquista y diputado del PSUC en la primera legislatura, Miguel Núñez, que falleció el pasado 12 de noviembre en Barcelona.
El homenaje fue promovido por Izquierda Unida (IU) e Iniciativa per Catalunya Verds (ICV) y en el acto intervinieron además de los diputados de estas formaciones, Gaspar Llamazares y Joan Herrera; el presidente del Congreso, José Bono; la viuda de Miguel Núñez, Elena García; el decano de la Universidad Complutense de Madrid, Carlos Berzosa; y representantes de la Asociación para la Memoria Social y Democrática (AMESDE) y de ACSUR España.
Miguel Núñez nació en Madrid en 1920 y con 16 años se afilió a la Joventut Socialista Unificada y al PCE y luchó durante la Guerra Civil formando parte de la "Quinta del Biberón". Después de la guerra, fue detenido, siendo todavía menor de edad, y condenado a 30 años de prisión.
Estuvo en las prisiones de Atocha, Yeserías, Ocaña y Aranjuez y en 1943 salió de la cárcel y se trasladó a Barcelona, donde asumió la responsabilidad política de la Agrupación Guerrillera de Cataluña. Volvió a ser detenido en mayo de 1945, encarcelado en la Prisión Celular (Modelo), y después continuó realizando una gran actividad clandestina en Barcelona, Andalucía y Euskadi.
Tras cuatro años de exilio en Francia, regresó en 1953 para centrarse en el PSUC y en el PCE. En 1958 fue detenido, torturado y condenado de nuevo a 59 años de prisión e ingresa en el penal de Burgos, saliendo en libertad provisional en el año 1967. Volvió a la clandestinidad y asumió la responsabilidad del PSUC en el interior. En el año 1977, en las primeras elecciones democráticas tras la dictadura, fue elegido diputado en el Congreso de los Diputados por el PSUC.
Tanto Llamazares como Herrera recordaron la trayectoria de Núñez y otro tanto hizo Bono, quien confesó que nunca había hecho pública la relación de amistad que le unía al homenajeado y se mostró su agradecido de poder participar en el acto.
Bono aludió a los episodios que Núñez le narraba en algunas de las cartas que le escribió Núñez a partir de 1979, recordó que ambos pasaron juntos en el hemiciclo del Congreso el frustrado golpe de Estado del 23 de febrero de 1981 y que el diputado del PSUC fue de los que se negó a salir del Salón de Plenos pese a que podría haberlo hecho por su edad.