Cospedal critica que Rubalcaba pidiese disculpas a Caruana por el incidente de Gibraltar

MADRID, 9 Dic. (EUROPA PRESS) -

La secretaria general del Partido Popular, María Dolores de Cospedal, criticó este miércoles que el responsable del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, pidiese disculpas al ministro de Gibraltar, Peter Caruana, y afirmó que España debe relacionarse con Gran Bretaña. "El comportamiento del ministro pidiendo disculpas sin dar ningún otro tipo de explicaciones no es el más acertado para reivindicar la soberanía española", argumentó.

Así se pronunció Cospedal en declaraciones a Antena3, recogidas por Europa Press, a propósito del incidente protagonizado el pasado lunes cuando cuatro guardias civiles fueron retenidos por las autoridades gibraltareñas cuando perseguían una lancha de narcotraficantes. Esta situación que parece, a su juicio, "bastante de tebeo", está enmarcada en una política "muy equivocada" con Gibraltar en la que desde la visita del ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, se han producido "demasiados incidentes seguidos".

Cospedal considera que Gibraltar es una colonia que "ya no debería existir" y cree que España debería establecer sus relaciones con Gran Bretaña ya que el Peñón "no puede ser reconocido como un país soberano". "Lo que no puede pasar es que Gibraltar trate de conseguir algo que no tiene ni por derecho ni por Historia ni por Ley, no tiene aguas jurisdiccionales y España no lo puede reconocer", añadió.

"El problema es que no puede ser reconocido como un país soberano. Es una colonia británica y las relaciones de España tienen que ser con la metrópoli y Gibraltar es una colonia todavía, que no debería existir, que ya no debería estar ahí", indicó la dirigente 'popular'. Enfatizó que el Gobierno no puede admitir "por mucho que diga Peter Caruana" que este territorio tiene aguas jurisdiccionales. "Otra cosa es la zona del puerto", puntualizó antes de denunciar el "permanente acoso" que sufren las Fuerzas de Seguridad españolas por parte de la Policía del Peñón.

DÍA DE LA CONSTITUCIÓN

Tras cargar contra la falta de "criterios claros" en materia internacional, se refirió a la política nacional y en particular a las ausencias de los presidentes autonómicos del PP en el homenaje a la Constitución celebrado la semana pasada. A este respecto, indicó que los barones autonómicos de las comunidades gobernadas por los 'populares' "siempre están en el día de la fiesta nacional". "Y nunca nadie dice nada", se quejó, para plantear que algunos que tienen "mala conciencia" necesitan ir al reconocimiento de la Carta Magna y añadir que el presidente de la Generalitat de Cataluña, José Montilla, "está dando patadas a la Constitución todos los días".

Después de recordar que al acto asistieron las "representaciones más oportunas" del PP como Mariano Rajoy y Soraya Saénz de Santamaría, concluyó que su partido hoy en día ganaría las elecciones generales porque el deseo de un cambio en España "se palpa en el ambiente".

LOS DELINCUENTES, LOS "BENEFICIADOS"

El portavoz de Interior del PP en el Congreso, Ignacio Cosidó, también se refirió, en una entrevista en la Cadena Cope recogida por Europa Press, a la retención de cuatro agentes del Instituto Armado en Gibraltar. A su entender, este episodio pone de manifiesto "la falta de firmeza" del Gobierno español en política exterior.

Cosidó puso de manifiesto que el narcotráfico es un tema de interés común de España, Gibraltar y Gran Bretaña, por lo que advirtió de la inconveniencia de tener "una zona caliente y conflictiva" para el tráfico de ilícitos en el Estrecho. Así, emplazó a que las diferencias entre países no se conviertan en "ventajas" para los delincuentes así como a abrir un proceso de diálogo con las autoridades británicas.

Tras reclamar que "los delincuentes no sean al final los beneficiados de la falta de entendimiento entre Reino Unido y España", hizo hincapié en que las autoridades competentes en materia de seguridad son las británicas y concluyó que los guardias civiles fueron retenidos de manera "muy improcedente" cuando cumplían con el "deber" de perseguir a unos presuntos 'narcos'.