MADRID, 24 Mar. (EUROPA PRESS) -
La cola de personas que aguardan para entrar en el Congreso de los Diputados para visitar la capilla ardiente del expresidente Adolfo Suárez medía, poco más de dos horas después de su apertura, casi un kilómetro y medio de longitud haciendo eses en calles de los alrededores de la sede parlamentaria.
La hilera de personas comienza en la calle Alcalá a la altura de la boca de metro Banco de España, asciende por delante del Círculo de Bellas Artes y gira hacia la calle Cedaceros, donde vuelve a torcer hacia Los Madrazo. Baja toda esta calle y vuelve a salir al Paseo del Prado, pasando por el Museo Thyssen. Una vez allí, gira en la esquina con la Carrera de San Jerónimo recorriendo la parte de ésta que transcurre hasta la entrada principal del Congreso, por donde los ciudadanos acceden a la capilla ardiente.
La cola avanza razonablemente rápido y miles de personas han entrado ya en la capilla ardiente del primer presidente de la democracia, instalada en el Salón de Pasos Perdidos de la Cámara Baja. Tras presentar sus respetos ante el féretro, los ciudadanos abandonan el Congreso por la puerta que da a la calle Fernanflor.
En el transcurso de esa cola, los ciudadanos, entre los que predominan personas de mediana edad, soportan estoicamente el viento frío que este lunes ha vuelto a hacer acto de presencia en la capital madrileña, lo que ha hecho que muchos de los bares y cafeterías ubicados en las calles por las que atraviesa la cola estén hoy más concurridos de lo habitual.
Quienes también ha aprovechado para hacer negocio son varias floristas que, casi desde que ha comenzado a formarse la cola, han instalado pequeños tenderetes en los que venden claveles al precio de un euro la unidad.
Precisamente, Posada ha comentado, mientras saludaba a muchas de las personas que guardan cola para entrar en la capilla ardiente del expresidente del Gobierno Adolfo Suárez que la gran afluencia de gente para despedir al político centrista pone de manifiesto el respaldo de la sociedad a un modo de hacer política que "busca el consenso y los acuerdos" y que no es nada "cainíta".
En declaraciones a los medios de comunicación en la carrera de San Jerónimo, Posada ha señalado que la presencia de cientos de ciudadanos que desde primera hora de esta mañana han aguardado para rendir homenaje al expresidente demuestra que la personalidad de Suárez "ha calado profundamente en todo el pueblo español, entre los que le conocieron y entre los que no pero que escucharon a sus padres hablar de él o lo estudiaron en la escuela".
"Representa un tipo de hacer política que a muchos en España les gusta; con confrontación cuando tenga que haberla pero buscando lo mejor para el país, el consenso y los acuerdos, no cainíta porque el adversario no es un enemigo, es uno que opina distinto pero que es demócrata", ha ensalzado el presidente de la Cámara baja, donde desde primera hora de la mañana se encuentran los restos mortales del primer presidente de la democracia.
Posada ha dicho que entre las personas que quieren dar su último adiós a Suárez predomina la gente mayor porque "son los que le han conocido y los que saben qué ha significado" pero que también --ha advertido-- hay gente joven.
Además, ha admitido que esperaba esa multitudinaria afluencia de público. "Hubiera sido para mí una sorpresa muy negativa si hubiera visto que no había gente para hacerle un homenaje a Adolfo Suárez", ha añadido.
Por último, Posada ha recordado que se prevé que la capilla ardiente esté abierta toda la noche aunque será la decisión dependerá de la familia y del número de personas que se encuentren esperando para entrar. "Por parte del Congreso, ni el más mínimo inconveniente para que esté abierto toda la noche", ha concluido.
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