PALMA DE MALLORCA 14 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Fiscalía Anticorrupción está investigando un supuesto fraude en las obras del Metro de Palma, que podría ascender a 3,8 millones de euros, después de que la Conselleria de Movilidad y Ordenación del Territorio presentara ayer una denuncia por la facturación durante la pasada legislatura de 2,5 millones de euros correspondientes a obras que realmente no se ejecutaron y por el abono sin ningún tipo de contrato de 1,3 millones a una consultora de ingeniería encargada de controlar los trabajos de esta infraestructura.
Así lo informó a Europa Press el director general de Movilidad, Antoni Verger, quien explicó que la Conselleria ha decidido poner en conocimiento estos hechos ante la Fiscalía Anticorrupción tras encargar una auditoría técnica de las obras del Metro a la empresa INECO-TIFSA, así como una posterior auditoría jurídica al gabinete de Miquel Coca.
Verger detalló que tras estas auditorías, los servicios jurídicos de la Conselleria han considerado que existían una serie de hechos "relevantes" durante las obras del Metro que podrían tener "algún indicio de infracción penal" y, en este sentido, recalcó que "hemos cumplido con nuestra obligación de defender el interés público".
Concretamente, señaló que las citadas auditorías técnicas y jurídicas detectaron que había una serie de "unidades de obras certificadas" por la entonces directora de obras del Metro, Ana García, que no habían sido ejecutadas y cuyo coste ascendía a 2,5 millones de euros.
No obstante, destacó que este pago aún no se ha hecho efectivo y remarcó que se restará de la liquidación final, tras no constar que estos trabajos se llevaran a cabo, pese a estar certificados por la anterior directora de Obras, sobre quien recaería toda la responsabilidad penal, en caso de que la Fiscalía considerase que se ha cometido algún tipo de infracción.
Asimismo, la Conselleria de Movilidad ha puesto en conocimiento de la Fiscalía el pago durante el anterior Govern de Jaume Matas de una partida de 1,3 millones de euros "sin ningún tipo de base contractual" por parte de Servicios Ferroviarios de Mallorca a la Consultora Global TM, encargada de fiscalizar el transcurso de las obras, lo que también podría ser constitutivo de algún delito.
Verger remarcó que el objetivo del Ejecutivo autonómico "no es criminalizar" a la ex-consellera de Transportes, Mabel Cabrer, sino "aclarar" una serie de hechos y "esclarecer hasta qué punto ha habido irregularidades en el manejo de fondos públicos que deben ser empleados de manera adecuada".
El director general de Movilidad recalcó que ha sido "muy fácilmente comprobable" las citadas irregularidades, ya que a través de un simple "muestreo" han ido apareciendo certificados de obras inexistentes, referidas entre otros aspectos a instalaciones eléctricas o a pinturas, lo que "nos pareció suficientemente significativo como para ponerlo en conocimiento de la Fiscalía por si existe algún tipo de delito".
"Se podría seguir analizando para ver si existen más obras certificadas sin ejecutar, pero supondría un trabajo enorme y un gran gasto de dinero", subrayó, al tiempo que admitió que es "prácticamente imposible y desbordante examinar toda la obra del Metro de Palma", aunque expresó su "total colaboración" con la Justicia.
"IRREGULARIDADES ADMINISTRATIVAS"
Por otro lado, Verger recalcó que con independencia de la posible comisión de algún delito, durante las obras del Metro también se produjeron constantes "irregularidades administrativas", lo que provocó "defectos múltiples" en todos los trabajos de esta infraestructura, "producto de una mala gestión y de errores garrafales a nivel de proyecto y ejecución".
En este sentido, criticó que, según la auditoría técnica del Govern, "no consta que hubiese una supervisión de los trabajos del Metro", lo que provocó la inundación de esta infraestructura el pasado 22 de septiembre de 2007, pese a que las precipitaciones de lluvia sólo alcanzaron los 15 litros de agua por metro cuadrado.
Así, el director general de Movilidad indicó que esto fue consecuencia de que las obras del Metro fueron tramitadas con "graves errores", mientras que a su vez, la Dirección de Obras "modificó el proyecto original sustituyendo aspectos que eran adecuados por materiales con una calidad muy inferior", pese a que no le competía este tipo de decisiones. Además, añadió que el proyecto se redactó de forma "muy rápida y sin supervisión técnica".
Todo ello, según recordó Verger, supuso un gasto de 28 millones de euros más por parte del actual Govern para reparar el Metro, que tuvo que suspender su actividad, debido a las inundaciones provocadas por la lluvia. De este modo, remarcó que pese a que en un principio esta infraestructura tuvo un coste de 318 millones de euros, finalmente el Metro ha contado con un presupuesto de 343 millones de euros sin contar los intereses.
UN METRO DE 500 MILLONES DE EUROS
Para hacer frente al coste de este medio de transporte, que asciende a 500 millones de euros contando los intereses, Verger explicó que el Govern pidió un crédito, de forma que hasta el 2022 o 2023 no estará finalizado el pago de esta infraestructura.
De esta forma, detalló que hasta el 2011, la Conselleria de Movilidad pagará anualmente 12 millones de euros, mientras que a partir de ese año, la cantidad ascenderá a 25 millones, aunque habrá ejercicios en los que se pague menos.
Finalmente, Verger resaltó que a pesar de las citadas irregularidades, el Metro de Palma es un medio de transporte que da "muy buen servicio", tal como, según señaló, lo demuestra el hecho de que continúa incrementando el número de usuarios.