Gallegas.- El PSOE cuestiona ante la Junta Electoral la exigencia del DNI a los emigrantes y el PP cree que busca tajada

Los socialistas avisan a la JEC de que será "única y exclusiva responsable de privar de derecho de sufragio a miles de españoles"

MADRID, 26 Ene. (EUROPA PRESS) -

El PSOE ha registrado un escrito ante la Junta Electoral Central cuestionando la reciente instrucción que obliga a los emigrantes a adjuntar una fotocopia del Documento Nacional de Identidad (DNI) para votar en las próximas elecciones, tanto en las autonómicas gallegas y vascas como en las europeas de junio y en el futuro. El PP, impulsor de ese requisito, cree que los socialistas no quieren transparencia porque prefieren un voto emigrante "del que puedan sacar tajada política".

En su instrucción del pasado 20 de enero, la Junta Electoral Central decidió que los ciudadanos inscritos en el Censo Electoral de Residentes Ausentes (CERA) deberán incluir en el sobre a enviar a la Junta Electoral Provincial, junto con el sobre y papeleta de votación y el certificado de inscripción en el censo, una fotocopia del pasaporte o del DNI expedidos por las autoridades españolas o, en su defecto, por el consulado de España en el país de residencia.

El organismo arbitral señala además que la "nota explicativa" que ha de acompañar al envío que realiza la Oficina del Censo Electoral de la documentación necesaria para la votación debe incluir, "con tipografía destacada", la necesidad de adjuntar dicha documentación.

El presidente de la Xunta y candidato socialista a la reelección, Emilio Pérez Touriño, dijo que esta decisión de la Junta Electoral debe ser "respetada" y "aplicada", aunque el PSOE ha decidido pedir aclaraciones al organismo arbitral al considerar que la exigencia del DNI o pasaporte no está contemplado en la normativa electoral vigente desde 1985.

REQUISITO NO RECOGIDO EN LA LEY

En primer lugar, y teniendo en cuenta que los procesos electorales del 1 de marzo ya están en marcha, el PSOE pide que se declare expresamente el carácter retroactivo de la instrucción para saber cómo va a aplicarse para las elecciones gallegas y vascas.

A su juicio, se está revocando la doctrina que ha venido siguiendo la Junta Electoral en anteriores procesos y, al introducir un nuevo requisito, habrá que aclarar también los criterios sobre votos nulos ya que, a partir de esta instrucción, se inadmitirán votos que hasta ahora eran válidos.

Por último, el PSOE cuestiona la aplicación a los emigrantes de los documentos identificativos que ahora se exigen. Así, recuerda que el DNI sólo se puede expedir en España y que la mayoría de residentes en el extranjero no lo poseen, como también ocurre, en su opinión, con el pasaporte, que es un "documento de viaje" que no suele necesitar quien carece de recursos o no tiene previsto viajes. Quedaría la certificación de nacionalidad pero el PSOE argumenta que la administración consular no tiene capacidad para gestionar ahora una previsible demanda de miles de certificaciones.

"La estructura del PSOE, en el exterior, ha constatado que una inmensa mayoría de los españoles inscritos en el CERA no tienen ni DNI ni Pasaporte y la imposibilidad de que las oficinas consulares tramiten en plazo miles de solicitudes de certificación de inscripción supone, de hecho, que se va a privar de su derecho de sufragio a miles de españoles, responsabilidad que tendrá que asumir, única y exclusivamente, esa Junta", advierte.

PP: DOBLE MORAL DEL PSOE

Para el PP, este 'escrito de aclaraciones' del PSOE es "un recurso en toda regla" que, según el diputado Celso Delgado, obedece a "razones inconfesables" que, en su opinión, pasarán factura a los socialistas. "El PSOE declara abiertamente su guerra a que los emigrantes voten en las mismas condiciones que el resto de españoles --declaró en el Congreso-. Demuestra que no quiere transparencia".

Celso Delgado se quejó de la "doble moral" del PSOE porque "con la boca pequeña" dijo que acataría la resolución y ahora la recurre. "Ni en Madrid ni en Santiago de Compostela; ni José Blanco, ni Rodríguez Zapatero ni Pérez Touriño quieren condiciones de igualdad en el voto. Quieren un voto del que puedan sacar tajada política".