MADRID, 10 Oct. (EUROPA PRESS) -
El expresidente de Bankia Rodrigo Rato sacó un total de 16.300 euros del cajero con 'tarjeta B' durante los tres últimos meses al frente de Caja Madrid y su antecesor en el cargo, Miguel Blesa gastó durante un sólo día casi 9.000 euros en el Hotel Ritz de Madrid.
Son dos de las informaciones que se deducen de los extractos bancarios que investiga el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu en una pieza separada del 'caso Bankia', a los que ha tenido acceso Europa Press.
Con las tajertas a su disposición, Miguel Blesa gastó 436.700 euros mientras que Rato cargó 44.217,47 euros a la tarjeta de Caja Madrid y 54.837,12 euros a la de Bankia (que devolvió).
Los apuntes incluidos en la documentación incluyen gastos como varios miles de euros en vino en el establecimiento Lavinia España Selección, durante la Navidad y otras ocasiones, de Miguel Blesa; o 1.849,23 euros en 'clubs, salas de fiestas, pubs, discotecas y bares' cuatro días seguidos, de Rodrigo Rato.
En este gráfico puedes ver los principales gastos de cada uno. Pasa el ratón por cada círculo para ver el detalle y pulsa para comprobar cómo cambio su gasto a lo largo del tiempo.
Entre los gastos de Rato se encuentran la compra de billetes de avión, instrumentos musicales o canales de televisión y el pago en gasolineras, hoteles, clubes de golf o restaurantes como Casa Lucio, Diverxo y Embassy.
Los cargos de Blesa entre enero de 2003 y enero de 2010 incluyen, por su parte, incontables pagos en gasolineras, hoteles y restaurantes, entre ellos muchos de lujo como Zalacain, Horcher, El Frontón, Jockey o Bice. Uno de los más elevados es un pago de 1.005 euros efectuado en el Marbella Club Hotel en agosto de 2009.
Los consejeros se gastaron 15,5 millones de euros en restaurantes, grandes superficies, hoteles, tiendas de ropa o joyerías. En concreto, el 33,2 por ciento de los gastos cargados en estas tarjetas corresponden a efectivo sacado de los cajeros, el 14,8 a desplazamientos y viajes, el 11,1 por ciento a grandes superficies, el 10,1 por ciento a restaurantes, el 8,3 por ciento a hoteles, el 5,8 por ciento a ropa y complementos y el 3,3 por ciento a alimentación. El 13,4 por ciento se correspondía con otros gastos no especificados.
El escándalo fue conocido después de que Bankia trasladara a su principal accionista, el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), una documentación y un CD con el detalle de movimientos bancarios que este organismo trasladó a la Fiscalía Anticorrupción.