El Gobierno admite que puede retirar banderas independentistas en los estadios para evitar alteraciones de orden público

MADRID 22 Sep. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno ha reconocido que las banderas 'esteladas', la senyeras del independentismo catalán, aunque no constituyen "ningún tipo de infracción" de la Ley contra la Violencia en el Deporte, pueden ser confiscadas en los estadios si la autoridad policial considera que hay riesgo de alteración del orden público.

A preguntas del diputado independentista Alfred Bosch, el Ministerio del Interior asegura que, con relación a las banderas catalanas con estrella, "no existen más directrices de las Delegaciones del Gobierno que las emanadas de la Ley contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte".

En ese sentido, y aunque admite que hay banderas o emblemas "que no constituyen en sí y de forma separada ningún tipo de infracción", se puede ordenar su confiscación "cuando se trata de un espectáculo deportivo de masas donde su exhibición puede provocar una reacción adversa y violenta por parte de unos sectores de aficionados" en función de circunstancias como "la rivalidad deportiva y/o regional, ideologías políticas de los distintos grupos de aficionados, lugares de exhibición, etcétera".

En ese contexto, el Coordinador de Seguridad de ese espectáculo deportivo "puede determinar que no se permita la introducción a los recintos deportivos de dichas banderas y/o emblemas, quedando normalmente en depósito en las consignas de los estadios, siendo retiradas a la finalización del evento deportivo por las personas que las portaban".

DECIDE EL COORDINADOR DE SEGURIDAD

En su respuesta a la que tuvo acceso Europa Press, Interior precisa que según la citada Ley "la persona responsable de la coordinación de seguridad en los acontecimientos deportivos (Coordinador de Seguridad), es aquel miembro de la organización policial que asume las tareas de dirección, coordinación y organización de los servicios de seguridad en la celebración de los espectáculos deportivos".

Ese responsable policial es quien "establecerá unas pautas a los organizadores de estos eventos con la finalidad de que se cumplan las condiciones de acceso y permanencia por parte de los espectadores y evitar cualquier posible alteración de orden público que pudiera menoscabar el normal desarrollo del acontecimiento deportivo".