MADRID 30 Sep. (EUROPA PRESS) -
El PP sacó hoy a colación en el Pleno del Congreso sus denuncias de persecución por parte de la Fiscalía y la Policía Judicial pero el ministro de Justicia, Francisco Caamaño, replicó que el agua no deja de ser agua por mucho que la agiten.
El diputado valenciano del PP Ignacio Gil Lázaro fue quien sacó el tema en la sesión de control al Gobierno aprovechando una pregunta sobre la disparidad de cifras entre la memoria de la Fiscalía y los datos de delincuencia de Interior.
"Llama la atención la discrepancia entre Fiscalía e Interior cuando tan coordinadamente andan de la mano en otros asuntos a la hora de perseguir a la oposición, aún vulnerando consideraciones esenciales del Estado de Derecho", aseveró.
INFORME "FABRICADO"
A su juicio, "no es admisible que algún policía fabrique informes que no han sido requeridos por ningún tribunal", en alusión al informe de la Policía que habla de una supuesta financiación ilegal del PP valenciano vinculada con el 'caso Gürtel'.
"No es admisible que la Fiscalía pasee esos informes a ver si consigue colocarlos en la percha de algún órgano jurisdiccional", continuó, en referencia a que dicho informe policial no tiene hoy quién lo investigue en los juzgados.
Y añadió: "No es admisible que Fiscalía e Interior permanezcan de brazos cruzados ante la reiterada comisión de un delito continuado de quebrantamiento del secreto sumarial", recordando así las denuncias del PP por las constantes filtraciones periodísticas del 'caso Gürtel, pese a estar bajo secreto de sumario. "La cuestión es tan palmaria como inquietante", sentenció.
El ministro de Justicia, Francisco Caamaño, era el encargado de responder a la pregunta sobre la Memoria de la Fiscalía y apenas varió su guión, limitándose a hacer uso de un proverbio frente a las quejas del PP: "Siempre es posible enturbiar la claridad del agua agitándola un rato, pero no por eso deja de ser agua", zanjó.