MADRID, 4 Ago. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel García Margallo, ha señalado que España va a cumplir a rajatabla la ley en el control de la verja de Gibraltar y ha señalado que con este caso "se ha acabado el recreo de la época de Moratinos", uno de sus predecesores en el Ministerio.
En una entrevista al diario ABC, Margallo ha apuntado que se está "recuperando todo lo recuperable de lo que cedió Moratinos". "Nunca antes de él un ministro de Exteriores había puesto a Gibraltar al mismo nivel que España y Reino Unido y reconocido algo como el Foro Tripartito" ha señalado el actual ministro, quien ha asegurado que se trató de "un disparate".
En este sentido ha enviado un mensaje a Gibraltar asegurando que "con este Gobierno las cosas nunca van a funcionar así". "Se ha acabado el recreo", ha insistido.
Margallo ha indicado que España va a revisar su legislación en muchos sentidos "para atajar todo lo que no funciona". Así, ha hablado de cambiar la ley de Juego, de cerrar espacio aéreo y de poner tasas para poder entrar y salir del Peñón, de unos 50 euros.
"Esa recaudación nos vendría muy bien para ayudar a los pescadores damnificados por la destrucción de los caladeros", ha explicado en referencia a los bloques de hormigón que desde Gibraltar se han lanzado al mar en la zona de faena de pesqueros españoles.
Para el titular de Exteriores, se trata de un delito medioambiental "gravísimo" que, según ha apuntado, "se va a impedir" bloqueando la entrada de hormigón y otros materiales necesarios para cometerlo.
Por otra parte, Margallo también ha abogado por controlar las "irregularidades fiscales de los 6.000 gibraltareños con propiedad en Sotogrande (Cádiz)".
CATALUÑA Y BÁRCENAS
Durante la entrevista, el ministro se ha referido a las consultas soberanistas de Cataluña y ha indicado que "cualquier movimiento disgregador o separatista va contra el sentido de los tiempos". Al respecto ha defendido "la importancia de integrarse en unidades cada vez más grandes como la misma UE". Además, ha explicado que no se siente "enfadado" cuando se silba el himno español sino "dolorido".
Finalmente, preguntado por el 'caso Bárcenas', Margallo ha mostrado su preocupación por el impacto en la moral pública de este suceso en un contexto de crisis como el actual. "Esto hace un daño tremendo sobre todo si se generaliza la idea de que todos los políticos están en política para hacerse ricos", ha concluido.