Le gustaría que la vicepresidencia la ocupara una socialista, pero está dispuesto a negociar ese cargo
MADRID, 20 Jun. (EUROPA PRESS) -
El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, se ha comprometido este lunes, si consigue ser investido presidente tras las elecciones generales del 26 de junio, a formar un gobierno "lo más representativo posible" que incluya a miembros de "las fuerzas del cambio", esto es, Podemos o Ciudadanos.
En una entrevista en Onda Cero, recogida por Europa Press, Sánchez ha señalado que le gustaría que su vicepresidenta fuese "una socialista" porque eso significaría que el PSOE ha obtenido un resultado en los comicios "lo suficientemente rotundo como para no tener que depender de otras fuerzas políticas".
Por eso, a la pregunta de si eso se traduce en que su vicepresidente sería de otro partido que le apoyase para formar gobierno, el líder socialista ha respondido que esa es la negociación que habría que abrir a la hora de conformar ese ejecutivo. "Creo que tenemos que hacer un gobierno lo más representativo posible de las fuerzas del cambio y esa será mi voluntad", ha explicado.
IGLESIAS NO SERA PRESIDENTE
Sánchez no ha especificado de qué partido preferiría que fuese ese vicepresidente, pero ha sido preguntado en varias ocasiones por los posibles pactos que podrían presentarse después del 26 de junio. En este punto, ha reiterado que el PSOE "no va a apoyar ningún gobierno del PP y Mariano Rajoy" ni el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, "va a ser presidente".
El líder socialista ha sido preguntado sobre este punto a raíz de que las últimas encuestas hayan dado por hecho que la coalición Unidos Podemos adelantará al PSOE el 26 de junio. Sobre este asunto, Sánchez ha remarcado que "las encuestas son importantes" porque "ayudan a ver la dinámica", pero ha dejado claro que los políticos no son "sociólogos" que se dediquen a interpretar sondeos, sino que serán los españoles los que decidan con su voto qué opción dan como ganadora.
"EL ÚNICO CAPAZ DE TENER MAYORÍA PARLAMENTARIA"
Por eso, ha apelado al 30 por ciento de votantes que, según la última encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), todavía están indecisos acerca de qué votar el domingo que viene, a los que ha recordado sus intentos por formar gobierno durante la pasada legislatura y a los que ha garantizado que "el único partido capaz de tener mayoría parlamentaria" es el PSOE.
"Pero para eso necesito que los indecisos apuesten por los que hemos tendido puentes, por los que hemos trabajado por cambiar las cosas frente a los del bloqueo. Todavía queda una semana. España necesita cambiar. El próximo gobierno va a depender de los millones de votantes del PSOE. Es la única salida que tiene España al bloqueo de los extremos", ha subrayado Sánchez en alusión directa a Mariano Rajoy y Pablo Iglesias, responsables, a su juicio, de que se hayan tenido que repetir las elecciones generales.
Sánchez ha recordado sus "principios básicos" a la hora de tratar de formar gobierno, entre ellos "no apoyar ningún gobierno liderado por el PP", pero tampoco un gobierno que "fragmente la soberanía nacional" y "ponga en riesgo la viabilidad económica y social de nuestro país". Según el secretario general socialista, el partido de Pablo Iglesias no cumple los dos últimos puntos.
A la pregunta de si se replantearía apoyar un gobierno de Unidos Podemos si éste adelanta al PSOE y si renuncia al referéndum en Cataluña, Sánchez ha respondido que esa cuestión incluye demasiados condicionales, tras lo cual ha vuelto a apelar al voto de los indecisos frente a otra opción que "bloqueó" la formación de un gobierno la pasada legislatura.
INDEPENDENCIA DE JUECES Y FISCALES
Sánchez ha admitido que el PSOE y Unidos Podemos pueden "converger" en ciertas "medidas sectoriales", pero ha afirmado que no admite que se ponga en cuestión la independencia de jueces y fiscales y el derecho de autodeterminación de tres comunidades autónomas.
A la pregunta de si, a pesar de todo, ve posible un programa de gobierno común entre los partidos de izquierda, el secretario general del PSOE ha evitado pronunciarse y se ha limitado a resaltar que "la lección que hay que sacar de los últimos seis meses es que el PSOE es el partido que más ha hecho por intentar un gobierno de cambio". "Si el PSOE sale fuerte, aquellos que dijeron que no tendrán que decir sí", ha apuntado.