El Tribunal de Cuentas admite que los registros contables "dan a entender la existencia de condonación de intereses"
MADRID, 8 Jun. (EUROPA PRESS) -
El PP acusó hoy de "financiación ilegal" al PSOE por las operaciones de renegociación de sus créditos en los años de 2004, 2005 y 2006, lo que considera "condonación de deuda" por un importe global que cifra en unos 35 millones de euros.
El Grupo Popular lanzó estas acusaciones en el Congreso ante el presidente del Tribunal de Cuentas, Manuel Núñez, que presentó el último informe anual de fiscalización de los partidos políticos, correspondiente a 2006, en el que se reflejan lo créditos que liquidó el PSOE por un importe global de 11 millones de euros y en que se impuso una multa a Unió Democràtica con 272.000 euros por aceptar un donativo que triplica lo permitido.
En ese informe, aprobado por la institución el pasado 25 de febrero y al que tuvo acceso Europa Press, el Tribunal de Cuentas se señala que tanto el PSOE como Eusko Alkartasuna negociaron en 2006 créditos vencidos que tenían pendientes de años anteriores alcanzando acuerdos que cubren el principal de las deudas.
LOS CRÉDITOS DE LA OTAN
En el caso del PSOE, el informe indica que su negociación con dos entidades de crédito ha permitido cancelar cuatro operaciones originadas antes de la ley de 1987 --créditos contratados principalmente para hacer frente a la campaña del referéndum de la OTAN de 1986, que no permitía subvenciones del Estado-- y que vencieron sin haberse pagado. El importe global era de 6,75 millones de euros (2,5 de principal y 4,24 de intereses). También se liquidaron doce operaciones, suscritas en su día por el PSE y Euskadiko Esquerra, que supusieron la entrega al banco de 779.754 euros (344.595,96 de principal y 435.158,04 de intereses).
Eso sí, el Tribunal decía desconocer los términos de la negociación que han ocasionado el cálculo de los intereses abonados, por lo que aseguraba que "no le es posible pronunciarse sobre la existencia o no de condonación de deuda por intereses ni, en su caso, sobre la razonabilidad de los intereses regularizados, al desconocerse el coste financiero devengado".
Cabe reseñar que la condonación de intereses supone una correlativa disminución de la deuda del partido con la entidad de crédito y, en consecuencia, una mayor disponibilidad de recursos para el partido, situación no regulada expresamente en la Ley de 1987 sobre financiación de las formaciones políticas.
Pero el presidente dio hoy un paso más y, en su intervención ante la Comisión Mixta, afirmó que en el análisis de la regularización contable de estas operaciones se observan resultados negativos y positivos, "correspondiendo estos últimos al PSOE por un total de 1,7 millones de euros, respecto a los que podría dar a entender la existencia de una condonación de intereses".
El portavoz del PP, Ramón Aguirre, abundó en esta tesis y apuntó que, uniendo los datos de 2006 con los de los dos ejercicios anteriores (2004 y 2005) más las cifras de unas pólizas de crédito, llega a la conclusión de que el PSOE ha obtenido una condonación de deuda de 35 millones de euros, lo que a su juicio determina "trato de favor" para los socialistas.
Núñez quiso dejar claro que el Tribunal de Cuentas no ha efectuado ningún cálculo del importe de esa posible condonación, aunque algún medio de comunicación llegó a hablar de más de treinta millones y que cualquier podría llegar a la conclusión de las cifras barajadas por el PP. "El informe dice lo que dice y además no quería decir ni una palabra más que la que dice", reconoció.
Para el diputado del PP, "estamos ante financiación ilegal del PSOE", recordando que "la condonación y la negociación de deuda están expresamente prohibidos" en la legislación entonces aplicable y preguntando al presidente del Tribunal de Cuenrtas "qué responsabilidades son exigibles".
LA LEY DE 2007 NO RESUELVE EL TEMA
La revisión de la Ley de 1987, acometida veinte años después y aprobada en 2007, sí abrió la posibilidad de que los partiodos renegociasen sus deudas pero sin fijar muchos requisitos, limitándose a enmarcar estas operaciones en los "usos y costumbres" habituales.
El problema no está resuelto y el presidente del Tribunal de Cuentas admitió hoy que la reforma de 2007 de la ley de financiación de partidos políticos tampoco "responde ni mucho menos" a lo que pidió la institución fiscalizadora. "Nos deja bastante insatisfechos", indicó, remarcando que aquella ley tampoco ha debido colmar los deseos del Legislativo, que ahora ha vuelto a pedir sugerencias de mejora aprovechando los trabajos de la subcomisión de reforma de la Ley Electoral.
Frente a las acusaciones del PP, el portavoz socialista, Manel Mas, se negó a entrar en el "y tú más" limitándose a señalar que la negociación del PSOE resuelve "viejos problemas" que "algunos cínicamente niegan", como son los derivados de la campaña del referéndum de la OTAN, un tipo de consulta en la que está prohibida la financiación pública, lo que obligó al PSOE a formalizar créditos con unos tipos, los de entonces, que nada tienen que ver con los actuales.
El senador independiente navarro Javier Tuñón, adscrito al Grupo Mixto de la Cámara Alta, también intervino en el debate para comentar al Tribunal otros casos más recientes de presunta financiación irregular, como la red Gürtel que afecta al PP o el caso Pretoria que ha salpicado a PSC y CiU.